Getafe
Alavés
A la octava llegó la vencida para el Getafe, que logró su primera victoria de la temporada para tomar aire y salir momentáneamente del descenso. Lo hizo con justicia, pues fue superior a un Alavés que ve frenado su buen momento y queda en la tabla con tres puntos más que el cuadro azulón, a priori un rival directo
Como se preveía, el partido fue intenso desde los minutos iniciales, con dos equipos que lo dejan todo en cada duelo por imperativo de sus entrenadores. Esto propició que fueran continuas las faltas y las interrupciones, saltando chispas en muchas ocasiones y con poco fútbol en realidad. Pese a ello, fueron los vitorianos los que avisaron primero, con un centro raso de Carlos Vicente que se paseó a un meto de la portería de David Soria sin encontrar rematador.
Los azulones, atenazados por la presión de ver su casillero de victorias a cero, no lograban intimidar y su rival volvía a probar fortuna con un chut de Stoichkov que tocó en Berrocal y se marchó a córner. Pero poco a poco, los pupilos de Bordalás fueron capaces de ponerle una marcha más al partido y comenzaron a acumular llegadas y merecer el gol. Ya lo tuvo Uche a los 22 minutos con una clarísima a pase de Carles Pérez, pero Sivera se agigantó en el mano a mano ante el ex del Ceuta.
Tampoco faltó la polémica. Así, pasada la media hora, el Coliseum pidió penalti en una pugna de Sedlar con Bertug que no pareció suficiente. Y tras una aparición fulgurante de Abqar para cortar otro avance en el área del delantero turco, llegó el gol que llevó el delirio a las gradas. Aprovechando la enésima falta cometida por el conjunto babazorro, Arambarri buscó el disparo directo y el balón tocó en la barrera para despistar a Sivera, haciendo subir el 1-0 en el 42'.
De ahí al descanso, el Alavés apretó y tuvo en su mano el empate por unos segundos, pero Díaz de Mera rectificó su decisión inicial, a instancias del VAR, y anuló la pena máxima que había decretado por manos de Uche, al que le había llegado el balón tras rebitar en un compañero.
Tras el paso por vestuarios, los de García Plaza parecieron salir más enchufados, avisando con un disparo alto de Jordán. Pero esta vez el VAR intervino para confirmar un penalti a favor del Getafe, por manos de Toni Martínez, y Luis Milla no falló desde los once metros para poner más tierra de por medio.
Poco antes de esa acción, García Plaza había optado por cambiar a casi toda su defensa y eso pareció acusarlo su equipo, que pecó de falta de concentración en varios lances y, lejos de poder recortar distancias, estuvo a punto de encajar el tercero. Fue Sivera, con sus magníficas actuaciones, quien evitó el gol ante Diego Rico o Carles Pérez, llegándose al final con un triunfo que permite a los azulones tomar aire.