Juande Pérez3 min lecturaCádiz y Mallorca se enfrentaban este domingo desde las 14:00 horas en el duelo que se celebró en el Estadio Nuevo Mirandilla. Están ciertamente acostumbrados en el Cádiz (antiguo Ramón de Carranza) a pelear hasta el último momento.
El Cádiz se jugaba más que el Mallorca y eso ya es decir mucho ya que los de Javier Aguirre suman 2 derrotas consecutivas y tienen el descenso a 6 puntos, puestos que marca precisamente el conjunto de Pellegrino. El partido entre Cádiz y Mallorca era un duelo de urgencias para los locales que a pesar de la derrota del Celta de Vigo este pasado sábado, no podía desperdiciar la oportunidad de recortar puntos a los gallegos y de paso a los bermellones.
El primer tiempo arrancó con el Cádiz dominando la posesión pero sin ser capaz de generarle peligro a la portería de Rajkovic. El Mallorca estaba muy bien plantado sobre el césped del Nuevo Mirandilla y esa seguridad se traducía en llegadas a la portería de Ledesma sin demasiadas elaboraciones. En la primera de esas llegadas del Mallorca a la portería de Ledesma, Valjent le puso un centro desde la derecha y medido a la cabeza de un Muriqi que la mandó al fondo de las mallas.
Se encontró el ariete bermellón con el gol con una sequía que ya se alargaba desde octubre. El Mallorca se colocaba por delante a los 11 minutos y los de Javier Aguirre se encontraron muy cómodos durante toda la primera mitad con un Cádiz que no se encontró con la frescura necesaria para hacerle daño a la portería de Rajkovic.
El segundo tiempo empezó de forma muy similar en el Nuevo Mirandilla. El Cádiz con la presión, buscaba la portería rival pero esta vez parecía hacerlo con algo más de claridad. El Cádiz empezó a sentirse con más frescura mental y de ahí vino el gol del empate cuando se llegaba a la hora de partido.
El centro desde la izquierda de Guardiola desde fuera hacia dentro, acabó con un remate de Chris Ramos en el primer palo. El empate llegaba para el Cádiz y el Nuevo Mirandilla se volcaba animando. El Mallorca, a pesar de que el empate no le iba mal, siguió intentándolo ya que los de Aguirre, en cuanto imprimían un poco de velocidad al juego, le hacían mucho daño a los locales.
A última hora, Sergi Darder para el Mallorca y Roger Martí para el Cádiz tuvieron sendas ocasiones que pudieron desequilibrar la balanza de un lado u otro.