Betis
Rayo
Con la tranquilidad del mercado de fichajes ya cerrado, habiendo conservado a sus grandes figuras y además habiendo reforzado el ataque verdiblanco casi sobre la bocina con el fichaje de Ez Abde, que llegó en la tarde de hoy a Sevilla y presenció el encuentro de sus nuevos compañeros como un aficionado más en la grada del Benito Villamarín, el Real Betis buscaba recuperar la senda del triunfo que se le había resistido en las dos últimas jornadas ante un rival, el Rayo Vallecano, que llegaba tras haber encajado siete goles ante el Atlético de Madrid.
Para ello, Pellegrini introdujo tres novedades en su once inicial, colocando a Bellerín en el lateral derecho, a Miranda en el izquierdo y a Rodri en el costado derecho ante de Aitor Ruibal, operado esta semana de apendicitis, continuando su apuesta en el doble pivote Guido-Roca, que tuvo mucho trabajo en la primera parte con la fuerte presión y las rápidas transiciones del Rayo Vallecano.
Y es que el conjunto de Francisco Rodríguez no se presentó en el partido para ser un mero espectador, quizás dolido en el orgullo por la goleada encajada pocos días antes el Atlético de Madrid y queriendo dejar claro que aquello fue un desliz. No se exponía más de lo necesario el equipo madrileño, que hoy vestía de negro, y aferrándose a la potente zancada de Nteka por dentro y la movilidad de De Tomás. También tuvo trabajo Miranda con Balliu e Isi, que subsanó perfectamente pese a ver una amarilla al cuarto de hora.
Precisamente fue Miranda el que dio el primer aviso del Betis con un disparo desde fuera del área, aunque la ocasión más clara de la primera parte sería para Ayoze y tras una buena jugada de Rodri por la banda derecha, Guido, descolgado, ponía el pase atrás para la llegada del tinerfeño que se quedaba sin espacio para definir ante Dimitrievski. El Betis lo intentaba pero acababa desquiciado al ver que las continuas disputas casi siempre acababan en falta en su contra, motivo por el cual Guido incluso acabó viendo la cartulina amarilla.
Le vino muy bien el descanso al Betis. Le sirvió para limpiar la mente y no caer en disputas que no llevaban a ningún sitio. Para ello, Pellegrini metió a Abner y Guardado y sacó el once a los dos amonestados (Miranda y Guido), y el Betis salió con una marcha más al terreno de juego. Pronto avisaba Isco con un disparo raso y cruzado que tan sólo la madera evitó que todo el Benito Villamarín cantara gol, pero poco después sería en una falta sobre el mismo '22', de donde naciera el único gol del partido.
Y ahí apareció el que hasta entonces no había podido: Willian José. El delantero verdiblanco asumió la responsabilidad del lanzamiento directo y lo bordó con un disparo no muy ajustado pero lo suficientemente potente como para que hiciera inútil la estirada de Dimitrievski. Cuando un delantero está en estado de gracia, no pueden decirle que no tire una falta, y eso hicieron sus compañeros. El 1-0 provocó que el Betis jugará más suelto, aunque el Rayo Vallecano nunca le perdió la cara al encuentro.
Pudo haber hecho el segundo Borja Iglesias nada más entrar pero como con Isco, el poste se alió con los visitantes, que intentaron buscar el tanto del empate metiendo toda la pólvora. Camello, Bebé o Falcao, pero ninguno pudo con Rui Silva. El Real Betis se va al parón con siete puntos, recuperando las buenas sensaciones tras la derrota en San Mamés y con un Isco que volvió un nuevo MVP, y ya van cuatro en cuatro partidos.
Ficha técnica:
Real Betis: Rui Silva, Bellerín, Pezzella, Luiz Felipe, Miranda (Abner 46'), Guido (Guardado 46'), Marc Roca, Rodri (Juan Cruz 76'), Isco (Altimira 92'), Ayoze y Willian José (Borja Iglesias 76').
Rayo Vallecano: Dimitrievski, Balliu, Aridane, Lejeune, Espino (Falcao 78'), Ciss (Kike Pérez 64'), Óscar, Álvaro, Isi (De Frutos 64'), Nteka (Bebé 78') y De Tomás (Camello 59').
Árbitro: Muñiz Ruiz (gallego). Amonestó a Miranda, Guido y Marc Roca por parte del Betis; a Álvaro, De Tomás, Isi y Kike Pérez por parte del Rayo.
Gol: 1-0 (52') Willian José.
Incidencias: Estadio Benito Villamarín.