Betis
Granada
El Real Betis se reencontró con la victoria (1-0) ante el Granada CF, que no pudo enlazar dos por vez primera esta campaña y aumentar, de paso, a tres la racha de derrotas de su anfitrión, que cabalgó sobre lomos de un renacido Luiz Henrique y venció con un solitario tanto de Isco Alarcón, un faro que ha podido alumbrar últimamente menos que al principio, pero que nunca se apaga del todo. La fe tuvo premio para los de Manuel Pellegrini, que aprovechan la derrota de la Real Sociedad en el derbi vasco para quedarse a un punto de la sexta plaza en este arranque de la segunda vuelta en LaLiga. Por su parte, los blanquirrojos se mantienen a cinco unidades de la permanencia, marcada por el Sevilla FC, aunque podrían alejarse una más si el Cádiz CF es capaz de vencer este domingo al Valencia CF. Los del 'Cacique' Medina reclamaron dos tantos anulados, pero las posiciones ilegales de Uzuni (sobre todo) y Arezo se antojan claras.
Las urgencias en ambos bandos se manifestaron nada más arrancar, con los nazaríes deseando enlazar un segundo triunfo liguero que les acercase a la zona de salvación y los heliopolitanos, romper con dos reveses, el último para quedar fuera de la Copa del Rey. De hecho, sólo la torpeza de Uzuni, que remachó casi bajo palos el remate de Lucas Boyé tras la pifia de Rui Silva, evitó que el 0-1 subiese enseguida al marcador, pero el fuera de juego resultó flagrante. Bryan Zaragoza y Luiz Henrique hacían estragos por el costado derecho de sus respectivos equipos, aunque Willian José no logró apuntillar entre un bosque de piernas la dejada desde la línea de fondo de su compatriota. Para colmo de males, una fea entrada de Bruno Méndez sacó del partido a un indiscutible como Ayoze antes del cuarto de partido, otra de esas acciones que, como el entradón de Savinho a Bellerín ante el Girona FC, acaban con mucho más castigo para el damnificado que para el infractor.
En el 23, la tuvo Assane Diao, sustituto del canario, que no pudo aprovechar a bocajarro una fenomenal dejada del ex de Fluminense, esta vez percutiendo hasta la cocina por el perfil izquierdo. Despejó Batalla, que quitaba a renglón seguido de la cabeza a Isco otro balón prometedor. El asedio era ya una realidad, con el cuestionado atacante de Petrópolis como maestro de ceremonias. Una penetración propició que el costasoleño disparara y Piatkowski desviara lo justo para que Willian no llegase por poco. El consiguiente córner lo peinó el propio Luiz Henrique para que el balón se paseara hasta el perfil contrario y, una vez devuelto a la 'zona comanche', terminase de manera idéntica al intento anterior de Isco, esta vez con Guardado frustrado por la interrupción del zaguero polaco. A diez del intermedio, Alarcón no llegaba por centímetros a colar el primero. Fue lo último, excepción hecha de un latigazo lejano de Bryan, fácil para Rui, de este intenso periodo.
La reanudación arrancó de la misma manera que la mitad inaugural, con una acción invalidada por posición ilegal, aunque no de un Lucas Boyé que obligaba al portero verdiblanco a lucirse. Abner, en otro zurriagazo desde la frontal, igualaba las sensaciones, ya tremendamente frías ante la lesión ahora de Aitor Ruibal, que debaja su sitio a los cinco minutos a Pablo Busto. Mucho más cerca anduvo de abrir el marcador Marc Roca, que provocó la 'palomita' a mano cambiada de Augusto Batalla entre los amagos deficientes de los dos laterales del anfitrión. Cumplido el cuarto de hora, Willian José le pegó mal en posición franca, aunque el pase de Abner había sido horrendo. Entre tanto, Assane caía dos veces en el área sin que se rompiese la mala racha del Betis en lo que a penaltis a favor se refiere (es el único de Primera al que no le han señalado ninguno este curso), aunque Cuadra Fernández acertó en su análisis.
La insistencia obtuvo premio en el 76, cuando Isco, que se había estrellado unos segundos antes con el buen guardameta rojiblanco, probaba fortuna a renglón seguido, aliándose esta vez con la melé dispuesta por el 'Cacique' Medina para que Arezo desviara lo justo para que el derechazo del de Arroyo de la Miel se colara entre las piernas del argentino para besar la red. Duraría muy poco la alegría en Heliópolis, pues Matías Arezo definía muy bien de puntera, a pase de Boyé, en un mano a mano con Rui Silva, aunque el tanto fue anulado de nuevo por fuera de juego. Un alivio para el conjunto de Pellegrini, que se reencontraba con el triunfo después de dos derrotas (en LaLiga y la Copa) que habían afeado una trayectoria en el campeonato regular (catorce jornadas sin caer) con el único pero de la acumulación de empates, que lastraba sus opciones europeas. Con este espaldarazo, la sonrisa se instala de nuevo en La Palmera. Y eso que Batalla, sumado al ataque en la última jugada, casi da el susto.
Real Betis: Rui Silva; Aitor Ruibal (Busto 50'), Pezzella, Sokratis, Abner; Guardado, Marc Roca; Luiz Henrique, Isco, Ayoze (Assane Diao 19'); y Willian José (Fekir 68').
Granada CF: Batalla; Bruno Méndez (Melendo 90'), Piatkowski, Ignasi Miquel, Neva; Bryan Zaragoza, Sergio Ruiz (Gumbau 68'), Gonzalo Villar (Hongla 86'), Callejón (Arezo 68'); Uzuni (Puertas 86') y Lucas Boyé.
Árbitro: Cuadra Fernández (balear), con el madrileño Pizarro Gómez en el VAR. Amarillas a los locales Sokratis, Assane Diao e Isco, así como a los visitantes Bruno Méndez, Uzuni, Batalla y Puertas.
Gol: 1-0 (76') Isco.
Incidencias: Encuentro correspondiente a la jornada 20ª de LaLiga EA Sports, disputado en el Estadio Benito Villamarín de Sevilla ante 50.197 espectadores, con nutrida presencia de aficionados nazaríes.