Kepa Arrizabalaga pasó del cielo al infierno en el partido de FA Cup ante el Manchester City. Detuvo un penalti a Haaland pero falló en el segundo de los mancunianos (1-2). El Bournemouth, eliminado
Kepa Arrizabalaga, jugador del Bournemouth - Cordon Press Manuel Pedrero3 min lectura
Se acabó el sueño del Bournemouth en la FA Cup. El combinado de Andoni Iraola no pudo con el Manchester City en el Vitality Stadium y serán los 'citizens' los que accedan a las semifinales del torneo más antiguo del mundo. Protagonismo agridulce para Kepa Arrizabalaga. El portero español fue titular, tal y como se preveía, y no tuvo su mejor tarde pese a detener un penalti a Haaland al comienzo del partido. El resultado final fue de 1-2 y la sensación del meta cedido por el Chelsea no fue positiva. Salió en la foto del segundo tanto de los mancunianos.
Se las prometía muy felices el Bournemouth después de que Kepa le parara un penalti a Erling Haaland. Era el minuto 13 de encuentro. El noruego no golpeó de la mejor manera y el cancerbero le adivinó la trayectoria deteniendo el lanzamiento con seguridad. Un inicio esperanzador para el que fuera canterano del Athletic Club de Bilbao que se vio prolongado con el tanto de Evanilson en el 20' a pase de Justin Kluivert. Así se llegaría al descanso, con toda la presión para el City.
El error de Kepa en el gol de Marmoush
Erling Haaland se sacaría la espinita del penalti nada más arrancar la segunda parte. El Manchester City salió en tromba y una buena contra por banda izquierda terminó en los pies de O'Reilly. En carrera ve llegar al atacante por la derecha y desde el interior del área bate de primeras a Kepa.
Un Haaland que también fue protagonista del duelo. Rebasada la hora de encuentro se marchó lesionado tras un lance con Cook. Omar Marmoush ocupó su puesto arriba y en el primer balón que toca convirtió el segundo del City. Eso sí, con la inestimable ayuda de Arrizabalaga. Su disparo, blando y centrado, no logró atraparlo y se le escabullía de las manos. Un error grotesco que terminó condenando las aspiraciones del Bournemouth.
En la recta final pudo ampliar distancias el Manchester City pero Kepa lo impidió. Su partido fue una montaña rusa donde predomina el sabor amargo. Su rendimiento ha bajado considerablemente en los últimos encuentros y su equipo lo está pagando.