Paco García3 min lecturaEl Real Oviedo cerró el 2022 este viernes con una sesión corta pero intensa a petición de su propio entrenador, Álvaro Cervera, quien exigió a los suyos en la última jornada de trabajo antes de recibir el 2023 y dará descanso a la plantilla hasta el próximo 2 de enero, solo cuatro días antes de recibir al Atlético de Madrid en Copa (miércoles, 20 horas).
El conjunto azul trabajó con las bajas ya sabidas de Miguelón, Borja Sánchez y Javi Mier, y mantuvo a Pomares y a Sergi Enrich a menor ritmo casi desde el principio, aunque a lo largo de la sesión otros jugadores como Montoro, Sangalli y David Costas fueron dejando el entrenamiento para trabajar al margen.
También en solitario se ejercitó Lucas, que lleva desde la vuelta de las vacaciones haciendo trabajo específico de descarga, y junto a él se quedó también un Alonso Aceves que se ha despedido ya de sus compañeros, con los que no entrena desde el pasado 21 de diciembre tras resolverse que será la primera salida de este mercado invernal.
La afluencia de niños a El Requexón está haciendo que Cervera mantenga la puerta abierta de los entrenamientos en este tramo final del año, aunque lo que no negocia el técnico oviedista es la intensidad y así se lo hizo saber a los suyos, sobre los que estuvo muy encima durante toda la jornada.
El guiño para la afición con su equipo lo guardó para el final de la sesión, momento en que todos brindaron con sidra achampanada para despedir junto a los aficionados y el resto de staff un 2022 que acaba con buen sabor de boca para todos los oviedistas.
El ecuatoguineano dará dos días de descanso al equipo y será a partir del lunes 2 cuando prepare el cruce de dieciseisavos de Copa ante el Atlético de Madrid, partido para el que están agotadas ya todas las entradas y para el cual el club azul ha activado una nueva opción de cese de asiento a sus abonados.
Quien no pueda acudir y ponga su asiento a disposición del club tendrá de regalo una invitación para el partido liguero ante el Alavés y ayudará a la entidad a seguir haciendo caja con la visita de los colchoneros al Carlos Tartiere.