Alvaro Arenillas3 min lectura¿Han llegado las prisas al mercado de fichajes del fútbol español? No, pero sí es hora de ir cerrando las plantillas, sobre todo porque la competición empieza ya y esta no espera a nadie –y mucho menos a los despistados–. Justo eso deben estar pensando por el Carlos Tartiere. El Real Oviedo, tras quedarse a un paso del ascenso el curso pasado al perder la final del play-off ante el RCD Espanyol, quiere dar forma a una plantilla aún más competitiva y parece ir camino de conseguirlo. Así, si hace escasos días cerró la contratación de Haissem Hassan, ahora ha fijado sus miras en otro jugador ofensivo como José Arnaiz.
La entidad carbayona quiere apurar al máximo sus opciones de refuerzo en el presente verano y ahora está centrada en apuntalar su delantera; eso sí, antes de dar el paso con el atacante de CA Osasuna o hacer lo propio con Álex Forés, necesitan liberar espacio salarial. Para conseguirlo, han certificado la cesión de Homenchenko, que jugará en el CD Mirandés, y ahora trabaja para dar igualmente salida a Álex Millán, quien apunta al fútbol portugués. Exacto, se trata de ganar margen económico para poder acometer una importante operación como sería el fichaje de Arnaiz.
A sus 29 años, Arnaiz apunta a dejar CA Osasuna tras un curso 2023-24 de LaLiga EA Sports en el que llegó a disputar 26 partidos para conseguir dos goles y una asistencia. En Pamplona entienden que es una pieza prescindible y por ello parece que no pondrían demasiadas trabas a su marcha, más teniendo en cuenta que le resta un solo año de contrato al concluir su vinculación el 30 de junio de 2025.
Si bien la última campaña no ha sido la mejor de Arnaiz, no es menos cierto que anteriormente brilló enormemente con el CD Leganés. Así, entre 2021 y 2023 disputó 77 partidos en Segunda división para aportar hasta 16 goles y 3 asistencias. Además de ser un futbolista que posee un gran golpeo, puede moverse por todo el frente de ataque, lo que le convierte en una pieza muchas veces indetectable para las defensas rivales.
Más allá de los fichajes que han llegado –y los que se esperan–, en el Oviedo también están muy pendientes de la situación de Oier Luengo, jugador que desea la Salernitana y que por ahora continuará en la escuadra asturiana, ya que esta ha rechazado una oferta de un millón de euros. El conjunto carbayón no se niega a dejarle salir, pero espera conseguir una propuestas que se acerque más a los tres millones de euros que marcan su cláusula de rescisión.