El Villarreal acudirá al mercado de enero en busca de refuerzos que ayuden a mejorar la situación de un equipo construido para pelear por Europa y que habita en la zona media-baja de la tabla, con el descenso a seis puntos y las plazas a europeas a doce. La prioridad es firmar a un extremo que venga a suplir al lesionado Yeremy Pino, pero también se busca un central.
La marcha de Mandi a la Copa África y el posible regreso de Gabbia al Milan podrían dejar a Marcelino con Albiol y Cuenca como únicos centrales específicos. Por ello, la semana pasada se informaba del interés del club castellonense en David García, anunciándose una oferta de entre 10 y 15 millones de euros que podría incluir también el pase de Mojica, cedido en Osasuna por el ‘submarino’.
En principio, el objetivo de la entidad que preside Francisco Roig es atar al defensor navarro, de 29 años, de cara a la próxima campaña, aunque no se descarta que pueda intentar su llegada en el mercado invernal. En caso contrario, se baraja la opción de hacerse con un cedido hasta entonces, surgiendo el nombre de un ex del club como Eric Bailly, actualmente en el Besiktas.
Pero desde Osasuna se toman con calma toda esta situación. Según apunta Diario de Navarra, a las oficinas de El Sadar ha llegado el interés por David García a través de terceros, pero ni hay oferta en firme ni existen conversaciones como tal con el Villarreal. Es más, la idea es no vender en enero, pues no se quiere debilitar al equipo a mitad de temporada, con la permanencia, la Copa del Rey y la Supercopa en juego.
Aunque existe buena relación entre ambos clubes, Osasuna ya ha demostrado que no tiene la necesidad de vender a sus activos y se mantendrá firme en esa postura de cara al mercado invernal. Otra cosa es lo que pueda suceder en verano.
Después de mucho tiempo sin traspasos de sus mejores futbolistas, porque no existe una urgencia como tal en este sentido, los dirigentes del club rojillo ya no descartan poder aliviar la economía del club con alguna gran venta. De hecho, cuando el Atlético de Madrid o el Nottingham Forest llamaron a la puerta para preguntar por David García, se les remitió a su cláusula de rescisión de 20 millones, pero ahora estarían dispuestos a negociar, siempre de cara a la próxima campaña.
Todo dependerá de si llega una oferta irrechazable y de lo que tenga que decir el propio jugador, si le hace ver al club o no que su ciclo en Osasuna ha terminado. Pero la idea es que no salga en enero, descartándose además que Mojica pueda entrar en esa hipotética operación que lleve al central pamplonés al Villarreal.