Osasuna está organizando su pretemporada pensando en el compromiso europeo de la Conference League, pese a que aún no está resuelto lo que sucederá. Todo se debe a un motivo: un expediente abierto por la UEFA al club de Pamplona por unos casos de amaño en dos partidos que concurrieron en la temporada 2013/2014. Después de que los inspectores que fueron designados por el máximo organismo europeo aconsejaran la expulsión de Osasuna de la próxima edición de la Conference League, el club ha presentado este viernes sus recursos, tratando de lograr un giro en la resolución para poder cumplir su sueño europeo. Todo esto, contrasta con la decisión con respecto al FC Barcelona, que sí podrá disputar la Champions League. Es complicado, que eso se dé. Pero, por si acaso, saben que tienen más opciones y las gastarían si fueran necesario.
Este mismo viernes ha presentado las alegaciones ante el Comité de Apelación de la UEFA, con la intención de hacer cambiarle de opinión. Aunque no será nada fácil que la recomendación de los inspectores, pertenecientes al Comité de Control, Ética y Disciplina, se modifique. La sanción por amaño de partidos en la temporada 2013/2014 sería la expulsión del equipo navarro de la Conference League 2023/2024. De momento, en la web del organismo sigue apareciendo el nombre de Osasuna como participante, un gesto que llenó de ilusión. No obstante, son conscientes de la realidad que afrontan y están batallando para lograr su cometido.
Los tiempos también influirían al Athletic Club, que está mirando de reojo todo lo que suceda por si a última hora resulta que consigue el billete europeo. En ese sentido, lo más inmediato es la resolución de la UEFA. Está se espera para la próxima semana (del lunes 3 al viernes 7 de julio). Pero si se confirmara una negativa por parte del organismo, en Osasuna tienen más vías para intentar salvar su presencia en la competición.
En este sentido, la entidad presidida por Luis Sabalza, podría acudir al TAS. Esta sería la última bala que podría agotar. El panorama no pinta demasiado bien, pero nada está dicho por el momento. A ello hay que unir los plazos de la propia UEFA, que serían un incordio en caso de que se retrasara su resolución en exceso. Es decir, si finalmente Osasuna acude al TAS, el organismo tendría que decir algo a más tardar el 7 de agosto. Ese es el día fijado para que tenga lugar el sorteo de la Conference League.
Si todas las opciones deportivas se agotaran… el club no descarta llamar a la puerta de la justicia ordinaria. Una acción desesperada con la intención de que el club pueda soñar un poco más con Europa. Osasuna logró clasificarse en los últimos compases de las 2022/2023, una temporada en la que el equipo ha rendido a gran nivel y ha sido bastante regular.