El triunfo ante el Rayo Vallecano del pasado viernes, certificado con un tanto ‘in extremis’ de Raúl García de Haro, ha supuesto un alivio para un Osasuna que acumulaba ya seis jornadas sin vencer. Una racha que ha dejado en stand by algunas gestiones referentes a la planificación de la plantilla de la próxima temporada, que ahora son retomadas.
En concreto, hay tres jugadores que acaban contrato en 2024, si bien en el caso de Pablo Ibáñez existe una cláusula de renovación matemática por un año más en función de objetivos, negociándose también un contrato que vaya más allá de ese periodo.
En cuanto a Darko Brasanac, inédito esta temporada, ya se le renovó por un año tras su grave lesión de rodilla, pero la intención es que se despida el 30 de junio. En esa misma ficha, por su parte, expira también el contrato de Rubén García, pero en su caso, su continuidad ha sido estudiada en los últimos meses y en breve está previsto que se produzca una reunión para presentarle una oferta, según informa Diario de Navarra.
A sus 30 años, el valenciano ha participado esta campaña en 14 partidos de Liga, anotando dos goles en 641 minutos de juego. Las tres últimas jornadas, además, ha actuado como titular, pero mas allá de que también ha alternado partidos encuentros como suplente, en el club rojillo valoran su implicación y el hecho de que sigue siendo un jugador del gusto de Jagoba Arrasate.
Actualmente, el ex del Levante cumple su sexta temporada en las filas del cuadro de Pamplona, tras aterrizar inicialmente como cedido y ser adquirido posteriormente a cambio de tres millones de euros. Un periodo que comenzó en Segunda división y en el que ambas partes han ido creciendo de la mano.
Rubén García siempre ha manifestado que está feliz en Osasuna y que le gustaría continuar, por lo que la sintonía entre las partes es total, si bien aún no se ha iniciado una negociación como tal. No obstante, el hecho de que su fichaje ya se encuentre amortizado juega a su favor en el aspecto económico, de cara a la propuesta que prepara la entidad rojilla, aunque habrá que ver qué otras ofertas tiene sobre la mesa, después de que años atrás llamaran a su puerta el propio Levante o el Chicago Fire de la MLS de Estados Unidos.
Por otro lado, Osasuna también sigue trabajando en la renovación de Aimar Oroz, que acaba en 2026, tras haber atado ya esta temporada a Jorge Herrando, Iker Muñoz y Ante Budimir, todos ellos renovados hasta 2027. En el caso del centrocampista internacional sub 21, la idea es que pase a ser uno de los jugadores mejor pagados de la plantilla, elevando a la vez su cláusula de rescisión de 28 millones de euros, existiendo también un buen entendimiento entre ambas partes.