Osasuna encara su partido aplazado en la primera eliminatoria de la Copa del Rey frente al Chiclana con la triste ausencia de su entrenador, Vicente Moreno, quien se encuentra en su pueblo natal de Massanassa ayudando a su familia y amigos con la limpieza del lodo provocado por las inundaciones de la Comunidad Valenciana. Mientras el entrenador valenciano se encuentra fuera, Dani Pendín ha cogido las riendas del equipo. No es la única ausencia dentro del equipo navarro.
Sobre el estado de Vicente Moreno, al que se le vio muy afectado en la previa del encuentro frente al Real Valladolid, su segundo ha asegurado que mantiene el contacto con él. “Tuvimos la oportunidad de hablar el cuerpo técnico con él y nos ha contado toda la dureza que está viviendo por llegar ahí y encontrarse con lo que se encontró. Lo está pasando mal, pero está mejor porque está con su familia, con sus hijos, por lo menos está más tranquilo. Aprovecho para agradecer al club la posibilidad y la facilidad que le dieron, y a Rubén, de liberarlos para que estén con las familias. Se agradece que Osasuna haga este reconocimiento y esperemos que vuelva pronto. Le dejamos tranquilo, está con cosas más importantes que hacer”, comentaba.
El técnico valenciano no es el único que está atravesando este triste momento. En la plantilla rojilla también está Rubén García, natural de Xàtiva, quien también se ha desplazado hacia su tierra para colaborar con las labores de limpieza. “Nosotros intentamos hablar con ellos, les damos la posibilidad de que si no tienen las ganas de entrenar no lo hagan, pero es de alabar que todos entrenan con muchísimas ganas y los que tienen familia ahí lo están pasando mal, por supuesto. Les apoyamos y les entendemos. A Rubén le he mandado un mensaje y me lo ha contestado. Está colaborando con la limpieza y esperemos que esto acabe pronto”, explicaba.
A pesar de jugar una semana más tarde a lo esperado, nada ha cambiado para el cuadro rojillo, que ha preparado la eliminatoria con la misma ilusión. “Habíamos preparado ya el partido. No se jugó, era evidente que no se podía jugar. Afrontamos con la misma seriedad e intención de pasar la eliminatoria porque tenemos un compromiso con el club, con la afición. Hay un par de matices, pero seguiremos igual, con el mismo respeto a un rival que conozco, porque vivo en Jerez y mi hijo muchas veces se enfrenta a este rival porque juega en la misma categoría. Conozco al míster, a muchos jugadores que los he tenido cuando entrenaba”, decía Pendín.
Por el momento no ha habido sorpresas con ningún equipo de Primera división. Aun así, en Osasuna son conscientes de la dificultad de enfrentarse al equipo gaditano. “Dentro de la diferencia de categoría que tenemos, cualquier equipo nos puede complicar. Tuvieron el detalle de no jugar en su campo y se agradece. Conozco mucho al míster y sé que trabaja los partidos, que mira al rival. Nos van a complicar en cosas que se emparejan, como es el balón parado”, finalizaba.