Alejandro Sáez3 min lecturaEl director deportivo de Osasuna, Braulio Vázquez, se refirió días atrás a la manera de trabajar del área deportiva del conjunto rojillo en RTVE de Navarra, donde aclaró que son cinco personas y que ordenan a los futbolistas a seguir en base a diferentes prioridades: fichar, seguimiento prioritario, fichar sin duda y fuera de mercado, que son jugadores que tienen unos salarios altísimos o están en equipos importantes. Es decir, justo lo que ocurría con Bryan Zaragoza, al que pudieron acabar de echarle el lazo cuando partió al Bayern y en Múnich no encontró los minutos que requería.
Un fichaje de Bryan Zaragoza para el que resultó clave la experiencia previa con Abde, al que el Barça vendió al Betis a cambio de 7’5 millones de euros y el 50% de la plusvalía de una futura venta después de su gran año en préstamo en El Sadar.
También se refirió Braulio Vázquez a otro de los nombres propios de este verano en clave rojillo. Se trata de Abel Bretones, quien suma dos tantos en los ocho encuentros disputados con Osasuna en este inicio de temporada. Y es como Braulio asegura, no sólo ficha futbolistas, sino también personas: “Bretones, por ejemplo, supercampechano, superhumilde. Ese contexto sabíamos que era seguro”.
Y es que en palabras de Braulio, Bretones era un un acierto seguro. Varios fueron los clubes que se interesaron el pasado verano por el lateral izquierdo. Entre ellos, el Alavés o el Betis, próximo rival liguero de Osasuna. Los verdiblancos, sin embargo, acabaron descartando esa vía, optando por otras opciones como la de Perraud y Ricardo Rodríguez, negándose a alcanzar los algo más de 3 millones de euros que marcaba la cláusula de Bretones y que venía solicitando el Oviedo.
Finalmente, Osasuna acabó haciéndose con los servicios del lateral zurdo a cambio de 2'8 millones de euros, firmando un contrato por cinco temporadas. Tras una larga negociación en la que el Oviedo rechazó una propuesta inicial de dos millones de euros, ambas partes acabaron llegando al entendimiento ligeramente a la baja de la cifra que marcaba su cláusula de rescisión.
“He visto equipos muy importantes que se van para Segunda división por no tener los pies en el suelo y lo que estamos viviendo, con perspectiva, dentro de muchos años, nos acordaremos de una final dentro Copa. De jugar en Europa. Pero ante todo, mantenerse en Primera división”, apostilla Braulio sobre el presente de Osasuna.