Alvaro Arenillas4 min lecturaEl trabajo de un director deportivo no comienza levantando el teléfono para fichar, sino analizando las carencias y virtudes de una plantilla que año tras año se intenta mejorar, aunque no siempre se consigue. Ese es a día de hoy el gran reto que tiene por delante Braulio Vázquez. Pretendido este verano por el Sevilla FC para que tomase el relevo de Monchi, el de Pontevedra finalmente decidió continuar en CA Osasuna e intentar llevar a los navarros a otro nivel tras un espectacular curso 2022-23 que incluyó la final de la Copa del Rey y la clasificación para la UEFA Conference League –no sin sobresaltos burocráticos–.
Con ese objetivo siempre en mente, desde hace tiempo se dio cuenta de la gran necesidad que tenía Osasuna y no ha tardado en poner toda la carne en asador para solucionar tal 'agujero' en el plantel. Así lo ha explicado él mismo en rueda de prensa.
"Era una necesidad deportiva, teníamos claro que necesitábamos un lateral izquierdo de un perfil muy claro. Fichamos a Mojica por lo que es. Hay que respetar la esencia del futbolista y él tiene una vocación ofensiva importante. Necesitábamos profundidad en banda y su perfil nos cuadraba perfectamente", ha comentado el gallego sobre la incorporación de Johan Mojica, quien ha llegado cedido por el Villarreal CF.
Braulio está contento con el paso que han dado y no lo esconde, pero no por ello deja de tener claro que se trata de un simple movimiento que necesita de otros para funcionar en conjunto; más aún enfrentándose a una temporada en la que la exigencia será máxima al estar en hasta cuatro competiciones: LaLiga, Copa del Rey, Supercopa de España y Conference League (si pasan la ronda previa).
"Os dije hace un año que teníamos la mejor plantilla de los últimos 6 años y al final el resultado me dio la razón. Vamos a intentar construir el mejor grupo posible. Si pasamos la eliminatoria de Liga Conferencia, va a ser una temporada durísima", señala antes de resaltar que habrá piezas que lleguen sobre la bocina en el actual mercado de fichajes.
"El año pasado Abde llegó el ultimo día y mira su importancia. Tenemos equipo para competir, está asentado y lo que podamos mejorar lo haremos y lo que no, no lo haremos. Tenemos que ser lo suficientemente fríos porque si se llevan futbolistas importantes, a veces hay que ser un poco previsores", analiza.
Braulio tiene claro que Osasuna está ante un año para disfrutar, pero no por ello debe olvidarse lo más mínimo de qué es lo que le da de comer. Por ello, avisa ya de cuál es el objetivo principal de cara a la campaña 2023-24. "Damos prioridad absoluta a la liga. Este año lo veo todo mucho más complicado, nosotros entrenamos muy fuerte, no vamos a poder preparar los partidos igual y hay jugadores que jugando un jueves no van a estar preparados a nivel físico y anímico para jugar el domingo", recalca.