Cuando un futbolista marca un gol de los llamados imposibles siempre surgen las mismas preguntas. ¿Golazo o golpe de suerte? ¿De verdad quería ponerla ahí? ¿Centro que se envenena o disparo magistral? Como todo en la vida, las respuestas suelen ser subjetivas y argumentadas según el cristal con el que se mire. Debates sobre la intencionalidad al margen, este pasado fin de semana la jornada 21 de LaLiga ha dejado uno de esos tantos que pasan a la historia y se recuerdan durante años. El autor fue el defensa Jesús Areso, que le dio la victoria a CA Osasuna ante el Getafe CF con un disparo sin ángulo desde la esquina derecha del campo que superó por alto a David Soria, pegó en el palo largo y se coló dentro de la portería azulona para desatar el éxtasis en El Sadar de Pamplona.
El de Areso es un golazo para la parroquia 'rojilla' y "un mal centro que acaba en gol" para José Bordalás, técnico del Getafe; pero la prueba de que la acción ha quedado grabada en la retina de todo los aficionados al fútbol la prueba el hecho de que, instantes después de ese definitivo 3-2 en el choque liguero de la sobremesa de este pasado domingo, eran tendencia en redes sociales jugadores ya retirados hace años que dejaron tantos muy parecidos hace unas tres décadas: el exmadridista Roberto Carlos, con su inolvidable latigazo al CD Tenerife; Robert Jarni, con una genial parábola en un derbi entre el Real Betis y Sevilla FC; o Christian Vieri, en el duelo europeo que medía a Atlético de Madrid y PAOK de Salónica.
Habrá muchos ejemplos más, como el de Jon Andoni Goicoechea a Alemania en el Mundial de EE.UU. en 1994 (con bastante más ángulo que los anteriores); pero ESTADIO Deportivo recuerda estos cuatro tantos y traslada la pregunta a sus lectores. ¿Y tú, con cuál te quedas?
Con 2-2 en el marcador, Arrasate dio entrada a Arnaiz y Areso en el minuto 73 para buscar el tercero. Sólo seis minutos más tarde llegó el gol de la temporada, el primero del lateral como futbolista profesional. Corría el minuto 79 cuando el de Cascante recibió el balón en tres cuartos de cancha pegado al costado diestro y aceleró tratando de desbordar al visitante Jordi Martín, que no despegó y le cerró bien hasta obligar al navarro a acabar en el banderín de córner. Desde allí soltó un golpeo, seco y potente, pegó en el segundo palo de la portería de David Soria sin que este ya nada pudiese hacer.
El 21 de febrero de 1998, en el estadio Heliodoro Rodríguez López de Tenerife, Roberto Carlos desafió a la física con uno de sus denominados 'goles imposible' (otro fue el de falta en un Francia-Brasil de la Copa Confederaciones). Desde la línea de fondo, en máxima carrera, sin ángulo y con la zurda -sin la rosca que da tirar a pierna cambiada-, Roberto Carlos soltó un zapatazo casi desde el córner que se coló por la escuadra contraria de Ojeda, entonces meta del equipo canario. Todo el mundo recordaba esta acción tras el gol de Areso.
El 17 de mayo de 1997, Robert Jarni ponía momentáneamente el 2-1 en un derbi en el Benito Villamarín que acabó con el espectacular resultado de 3-3. Era la jornada 38 de una liga de 42 jornadas al haber 22 equipos en liza. Era la primera jugada de la segunda mitad tras llegarse al descanso con 1-1 y el croata soltó un obús similar al de Roberto Carlos. Sin ángulo y desde el córner izquierdo, aunque con más parábola, menos potencia y un efecto no tan exagerado. El balón superó a Juan Carlos Unzué y ponía por delante al Real Betis. El Sevilla FC acabaría empatando con dos dianas en los últimos minutos.
El 21 de octubre de 1997, el Atlético de Madrid recibía al PAOK griego en la ida de los dieciseisavos de final de la antigua Copa de la UEFA. El italiano Vieri lideró la victoria colchonera por 5-2 con un 'hat-trick', entre ellos un precioso gol sin ángulo. El corpulento atacante fue capaz de acelerar a máxima velocidad para intimidar al portero Nikolaos Michopulos, que abandó su portería y saltó por encima de la pelota para dejarla salir por línea de fondo. El ariete rojiblanco fue capaz de frenarla sobre la misma línea y, con la izquierda dibujó una sutil rosca que entró en la portería vacía de los helenos. Cuesta elegir cuál es el mejor de todos.