El maleficio que persigue al Mallorca desde hace 16 años

La escuadra bermellona quiere cambiar su historia más reciente para dar un nuevo paso hacia la permanencia en Primera división

El maleficio que persigue al Mallorca desde hace 16 años
Muriqi se lamenta durante un partido de LaLiga - UES
Alvaro ArenillasAlvaro Arenillas 3 min lectura

La temporada 2022-23 del RCD Mallorca está siendo realmente buena. Incluido en ese nutrido grupo de equipos que lucha por salvar la categoría, el conjunto isleño ha ido sumando buenos resultados hasta el punto de ver cerca la orilla, ya que con 34 puntos está hasta siete por encima de los puestos de descenso con 10 encuentros por jugar.

Su situación es buena, pero no por ello pierden de vista una realidad que les persigue desde hace demasiado tiempo: son incapaces de ganar en Balaídos.

Tal cual suena. Los chicos ahora dirigidos por Javier Aguirre marchan este domingo 16 de abril a tierras gallegas con la idea de romper un maleficio que les lleva persiguiendo justo 16 años, ya que no vencen al Celta de Vigo en su estadio desde el lejano 2007. Desde entonces, cuatro empates y dos derrotes en los seis partidos disputados.

Aquella temporada, en la cual el equipo celeste acabaría descendiendo a Segunda División, el conjunto bermellón asaltó el estadio vigués con goles de Juan Arango, Fernando Varela y el argentino Maxi López. Eran otros tiempos, obvio, pero el Mallorca quiere revivir esa fantástica sensación de ganar en uno de los estadios clásicos de LaLiga.

Desde ese 2007, ambos equipos no volverían a verse las caras en la máxima categoría hasta el 18 de noviembre de 2012. Aquel duelo concluyó en tablas (1-1) después de que el Mallorca se adelantara con un tanto del israelí Tomer Hemed y el coreano Park igualase para los celestes en el arranque del segundo tiempo. En aquel curso 2012-13 los de la isla terminarían perdiendo la categoría para no volver a la élite hasta el 2019-20.

En su primer año de regreso a Primera división, el encuentro en Balaídos concluyó con empate a dos goles. Por parte local marcaron Rafinha e Iago Aspas, mientras que los tantos visitantes fueron obra de Salva Sevilla y Budimir.

Llegando ya a la pasada temporada, la 2021-22, el triunfo se acabaría quedando en Vigo después de que Iago Aspas transformara un penalti señalado por Ortiz Arias en el minuto 97. Fue uno de los partidos más locos que se vivieron en LaLiga. Hubo siete tantos y un intercambio de golpes constante; tanto es así que los vigueses se adelantaron en tres ocasiones y el Mallorca igualó otras tantas hasta que el encuentro quedó visto para sentencia desde los 11 metros. ¿Podrá el Mallorca acabar con su gafe? En breve lo sabremos.