Álex Martín4 min lecturaEl RCD Mallorca tiene un claro objetivo en este final de temporada: alcanzar los puestos que dan acceso a Europa. El conjunto que dirige Jagoba Arrasate es consciente de que, con el paso de las semanas, ha perdido algo de fuelle, pero no debe permitir que esto se prolongue demasiado en el tiempo. Son conscientes en Son Moix de que escuadras como el Celta o el Rayo Vallecano van a pelear hasta el final por este objetivo, por lo que necesitan de todos sus efectivos, como puede ser el caso de Cyle Larin, para poder conseguir una meta que puede llenar de euforia y alegría a todos en las Islas Baleares, que quieren vibrar con los suyos en el Viejo Continente.
El punta, que está en el punto de mira, ya que la grada no entiende su falta de compromiso, es la única solución a la que puede recurrir su entrenador de cara a un choque, ante la Real Sociedad, que se antoja más vital que nunca para un Mallorca que debe dar un paso hacia delante más que relevante en LaLiga EA Sports. A pesar de que su actitud, lejos de ser la ideal, durante el 1-2 ante el Celta sacó de quicio a los suyos, la lesión de Muriqi, tal y como apunta Diario de Mallorca, le puede dar mucha vida en una entidad que le necesita como agua de mayo para poder alcanzar Europa.
Esta es su gran oportunidad, y, atendiendo a lo que se ha podido ver sobre el terreno de juego este curso, es la única. No en vano, hay que observar que, cuando Muriqi no ha hecho acto de presencia, Larin ha podido brillar en el Mallorca. Sin duda, algo de lo más curioso, ya que esto evidencia que ambos delanteros no pueden convivir en el once de un Arrasate que espera que su jugador pueda dar un puñetazo sobre la mesa en el campeonato doméstico.
Después de que se lesionara Muriqi tras un comienzo de campaña discreto, Larin pudo aprovechar su oportunidad, dando una asistencia ante el Betis, marcando ante el Valladolid y aportando en la diana frente al Espanyol, otro de los clásicos en el torneo doméstico. Asimismo, su gol ante el Valencia y sus aportaciones frente a Girona y Getafe hicieron pensar a Arrasate con que, quizás, y solo quizás, había podido encontrar la mejor versión de su jugador.
Sin embargo, en este 2025, la entrada de Muriqi en el once como pareja de Larin terminó por apagar a su delantero, que, ahora, con la ausencia del kosovar, cuya renovación sigue siendo un foco de atención en la entidad que suele disputar sus encuentros en Son Moix, observa cómo se le abren, de nuevo, las puertas de un once en el que se quiere consolidar a toda costa. Tras haber sido titular por última vez el pasado uno de febrero ante el Atlético en la capital de España, es consciente de que esta puede ser su última bala en el Mallorca, que necesita encontrarse cuanto antes con su mejor versión para poder hacer acto de presencia en Europa el próximo curso.
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