El mazazo en forma de derrota recibido en el debut liguero por parte del Burgos no apaga la ilusión que generó y genera el nuevo proyecto del Málaga Club de Fútbol. El objetivo del ascenso atrae a los más fieles y también a aquellos que, desde el descenso a Segunda División, se alejaron más por diversos motivos.
Habla por sí solo los números que registra el Málaga en cuanto a ventas de camisetas se refiere. A estas alturas, el ingreso supera al generado por el club en la época de Champions League. Así lo explicó José María Muñoz, administrador judicial del club: "Se han vendido más camisetas que en la época de Champions. Hay mucha ilusión. Nos ha llamado mucho la atención".
Ha gustado mucho entre la afición boquerona los nuevos diseños de la marca Hummel. Además de la blanquiazul, la que más furor causa, la innovación con guiño incluido al estadio La Rosaleda en la segunda indumentaria también tiene su tirón en las tiendas físicas y online. "La segunda ha encantado, sobre todo a las mujeres. Es muy bonita. Estaremos en un millar vendidas y más de 5.000 la primera equipación. Son datos del primer mes", decía José María Muñoz.
Pese a la controversia y polémica con la campaña de abonados, las cifras son bastantes ilusionantes. Lejos del objetivo de los 20.000 abonados para este presente curso, el Málaga sí que supera a lo conseguido años atrás. "Somos ahora mismo 15.600 abonados justos y lo vamos a aumentar. Podemos superar los 16.000 abonados antes del lunes", exponía.
"El objetivo era superar los 15.000, la ilusión eran 20.000. Ya lo dije, 22 ó 23.000 significaría uno o dos jugadores de nivel. Animo a la gente, tenemos una de las grandes ciudades, el equipo de Málaga tiene que estar a la altura de la ciudad y no podemos estar en Segunda. Tiene que ayudar en parte el aficionado. Gijón y Oviedo, que tienen la mitad de la población que Málaga capital, tienen el doble de abonados que nosotros. Yo animo a la gente a que se apunte, esto es ilusión", terminaba el administrador judicial desde la Feria de Málaga donde acudió parte de la comitiva del club y donde atendió a Onda Cero.
Por último afirmó que encuentra bastantes dificultades para incentivar a las empresas de la ciudad a aportar su grano de arena con el club: "Hemos creado una cláusula en los contratos que si hubiera algún cambio en la propiedad del club, el contrato podría estar suspendido. Pero nos cuesta que las empresas malagueñas vengan a La Rosaleda. Y mira que nos desplazamos a ellos. Cualquier cantidad vale. Tenemos desde una frutería en Jugamos de Local. Desde 1.000 euros hasta lo que quieras, hacemos un traje a medida".