A día de hoy, el Málaga CF se encuentra a tan solo 10 puntos de la salvación, con 36 por jugar, lo que significa que el equipo debe empezar ser consciente de su posible entrada a Primera RFEF.
Después de volver del partido ante el Racing de Santander con otra derrota sobre los hombros, el equipo blanquiazul comienza poco a poco a ver un camino más oscuro frente a sus ojos, del que cada vez hay menos posibilidades de poder salir.
El equipo de Pellicer tiene bastante complicado hacerse con los puntos necesarios para conseguir la salvación a pesar de que a 12 jornadas por disputar en LaLiga SmartBank sea posible, sin embargo, teniendo en cuenta el recorrido del equipo durante la temporada, parece una misión prácticamente imposible.
Pese a que por un momento tanto el club como los aficionados comenzaron a sentir emoción tras la victoria ante el Real Zaragoza, generando esperanza y grandes expectativas de cara a las jornadas futuras, aunque esa euforia tan solo fue algo efímero, pues en poco tiempo el club volvió a bajar escalones generando de nuevo un ambiente tan tenso como el previo al de los partidos de los que salieron victoriosos.
El conjunto blanquiazul se encuentra antepenúltimo con 25 puntos en la tabla de clasificación. En los seis partidos en los que Pellicer ha estado al mando, el Málaga sólo ha sumado 4 de los 18 puntos posibles, lo que demuestra que a pesar de haber sustituido a Pepe Mel buscando una salvación para el equipo, su posición en el banquillo tampoco ha podido solucionar la mala situación del equipo.
Desgraciadamente el calendario que tiene por delante el conjunto de la Rosaleda tampoco ayuda a cambiar el rumbo de su situación. El próximo fin de semana deberá enfrentarse a la UD Las Palmas, un equipo que se encuentra como candidato al ascenso, siendo el actual líder de la clasificación, por lo que conseguir ganar en esta ocasión vuelve a ser una meta bastante complicada.
Pese a todo ello, el equipo no debe rendirse ni bajar los ánimos, así lo dijo Pellicer en la jornada anterior. El Málaga debe resistir y ser exigente en su trabajo, intentando dar todo lo posible en el campo, teniendo consigo un buen espíritu competitivo.
Hoy más que nunca, teniendo en cuenta su próximos rivales el conjunto de Pellicer necesita a su afición presente, aunque esto ya se está volviendo algo complicado para estos, pues es evidente que su equipo no se lo está poniendo nada fácil, sin embargo al fin y al cabo, el apoyo es algo incondicional.