Pablo Guede, técnico del Málaga CF, ha tratado en rueda de prensa la actualidad del conjunto costasoleño durante la previa al encuentro de este domingo ante la SD Huesca en El Alcoraz. Una cita en la que los malaguistas tratarán de darle la vuelta a la actual situación por la que atraviesa el equipo, tras un inicio de LaLiga en Segunda que no ha sido el esperado, habiendo sumado tan sólo un triunfo en las cuatro primera jornadas.
Sobre la derrota del pasado fin de semana ante el Albacete, ha dicho Guede: "Las normales que le doy a todos los partidos perdamos o ganemos. Siempre trato de mejorar. Es nuestro trabajo. La semana fue buena, como vienen siendo. Con predisposición e implicación de los futbolistas".
Guede, lógicamente, es el primer interesado en cambiar la dinámica del equipo, de ahí que se haya referido también a las sensaciones dentro del vestuario: "Están muy bien, porque son conscientes de lo que están trabajando y que tiene que tener premio. En ese sentido no hay cabezas gachas, ni dudas ni nada".
Sobre la cita ante el Huesca, clave para los intereses malaguistas, comentó: "Ganar siempre es lo mejor porque nosotros jugamos para ganar pero creo que nosotros tenemos que seguir, tengo muy claro lo que quiero y hacia dónde vamos".
Junto a ello, Pablo Guede trató otras cuestiones:
Dos partidos consecutivos a domicilio: "No, yo entiendo que perdimos en casa, que hace nueve meses que no se gana aquí. Pero me vi el partido dos veces y hay cosas que no puedes entender. El primer gol nos lo hacen 10 contra 6 y el segundo iba a las manos de Manolo y le rebota a Genaro. Cuando más expuestos estuvimos, en la segunda parte, el Albacete nos llegó menos veces. Esas cosas son las que me hacen seguir adelante porque son pequeños detalles. No me preocupa jugar fuera o dentro porque el comportamiento de la gente el otro día fue lo siguiente a bueno. Se esperaron al final del partido. Aguantó, apoyo, empujo, alentó… y cuando acabó, dio su veredicto y eso es lo que hay que hacer. Por eso me da lo mismo jugar aquí o fuera, no tengo esa preocupación".
El plan para El Alcoraz: "Vamos cuidar mucho las contras porque tienen gente muy rápida y vamos a intentar evitar centros laterales que ellos son muy fuertes por bandas. Esa es la línea en defensa. En ataque, trataremos de ir por fuera"
Los lesionados: "Estaría muy preocupado si fuera un exceso de trabajo. Pero lo de Burgos no lo pudimos evitar, se le clavó la rodilla contra el césped. La de Bustinza fue sacándose una bota. Caro fue un golpe y Ramalho sí fue jugando. Analizamos todo eso muchísimo. Intentamos ver dónde cometimos el error para no repetirlo. Ramalho hace bastante que no competía tres partidos seguidos con 90 minutos y no tenía ninguna molestia y fue en un lance del juego que sí puede ser por exceso. Y Juande y Luis no entran en ese apartado porque lo de Luis sabemos que viene de su lesión anterior, las descompensaciones físicas de la rodilla te llevan a tener esas molestias. Juande igual, de los meses de inactividad y la pretemporada no la ha podido hacer en condiciones. Para preocuparme, no. Si todas fueran como la de Ramalho, sí reconocería que es un error nuestro por la carga de trabajo, pero creo que estamos teniendo ese pelín de mala suerte".
N'Diaye: "Lo vi bien, tiene que seguir mejorando en todos los ámbitos. No es fácil llegar como llegó él y los primeros días fueron una locura. Esta semana ya estuvo más dedicado a su trabajo, se ha conocido más con los compañeros, que se entrene con todos…".
Los cánticos de la grada: "Hay una cosa que yo tengo muy clara, que la fractura entre la gente y Pablo Guede no se va a producir nunca porque yo amo a este club y la gente me quiere. Como entrenador, que me griten lo que me tengan que gritar, aunque duela, pero sé diferenciar muy bien la persona del entrenador. Con Manolo, José María y tal, lo normal de todas las semanas. No porque haya pasado eso o hayamos perdido en casa me tienen que dar más o menos. El autobús arrancó, el camino está hecho y tenemos que pasar por días de lluvia y de sol, pero siempre siento el apoyo todos. Porque mi relación con ellos está por encima de los resultados y saben que mi amor por el club es incondicional, y un resultado no va a cambiar el apoyo que me dan ellos. Porque noto el deseo de que me vaya de puta madre. Como entrenador, los resultados son los que mandan, y el trabajo y la entrega. Es un cómputo, es global. Hay pequeños detalles que hacen que un entrenador se tenga que ir o no del club y muchas veces las decisiones precipitadas perjudican más que favorecen. Yo entiendo esto, porque es fútbol y lo tomo como un juego. He pasado muchísimas veces por estas situaciones y de la gran mayoría he salido exitoso. El apoyo lo tengo incondicional de toda la gente del club porque me ven llegar a las 06:30 de la mañana e irme a las 20:30 de la noche".