Manuel Rocha4 min lecturaLa Unión Deportiva Las Palmas se mide en este cierre liguero de 2024 al RCD Espanyol, un conjunto que llega en horas bajas y con una gran necesidad de sumar puntos para poder salir de los puestos de descenso. Eso mismo fue lo que hizo el conjunto grancanario cuando le dio a Diego Martínez las riendas del equipo, allá por el inicio del mes de octubre. Manolo González, el entrenador de los barceloneses, lleva varias jornadas en el alambre, ya que su equipo no acaba de arrancar.
En la previa del encuentro, que se disputará el domingo a las 18:30, el entrenador gallego ha analizado la situación de su equipo y de su rival para este fin de semana. Sobre la situación del conjunto perico, explicaba: “El Espanyol tiene un contragolpe muy fuerte y rápido, también buen balón parado. Hemos de estar preparados para los diferentes partidos que van a suceder. Tiene gente rápida con buenas conducciones. Sabemos lo que es esa necesidad que puede convertirse en una fortaleza. Es un partido difícil, pero es ilusionante”.
Aunque los canarios sacaron la cabeza del agua, la situación en la zona baja es todavía muy pareja, y un traspiés te puede llevar de nuevo a la cola de la carrera. Las Palmas es 14º en la liga, con 19 puntos, y el Espanyol 18º, a apenas cuatro puntos de distancia. El encuentro es un duelo directo por la permanencia: “Los dos equipos tenemos la necesidad de sumar de cara al objetivo de la permanencia. En el encuentro vamos a necesitar paciencia y ritmo en la circulación. Eso a veces no es fácil, también saber elegir el momento de profundizar. Necesitamos calidad en el pase para profundizar en su estructura defensiva, a la vez de tener precauciones de no incurrir en transiciones defensivas. Porque ellos, insisto, son fuertes. Estamos preparados para cualquier encuentro. Pero la paciencia es importante. Puede ser un partido largo, condicionado por la necesidad".
Prácticamente un mes es lo que lleva Las Palmas sin caer derrotado, desde que lo hiciera ante el Mallorca por 2-3. Desde ese momento, ha cosechado victorias ante el FC Barcelona y ante el Valladolid en liga, donde también empató a cero cn la Real Sociedad, y en la Copa del Rey venció por 1-2 al CE Europa. “Cuando uno gana puntos tiene más confianza, alegría y rendimiento. Eso influye en cómo te ven los demás”, apuntaba el técnico vigués.
Para este encuentro, los pío-pío cuentan con una duda importante. Se trata de Alberto Moleiro, uno de los jugadores más desequilibrantes de las filas amarillas. Así lo explicaba el propio Martínez: “No sabemos si va a poder estar ni cuanto tiempo puede estar. Queremos valorar bien qué riesgos o no asumimos. Con Moleiro estamos en el alambre. Él quiere estar, su predisposición es buena, el trabajo de los servicios médicos es excelente, pero vamos a ver”.