Alberto Gálvez4 min lecturaComo en cualquier curso, cuando no se hacen los deberes, al final del mismo llegan las lamentaciones, las disculpas y los propósitos de enmienda. Y tras la derrota en el Sánchez-Pizjuán, el Granada selló casi de manera matemática su descenso a Segunda División. A once puntos del Mallorca y con sólo doce por disputarse ya, los nazaríes ya han soltado las calculadores y han comenzado a asumir la nueva realidad que se les avecina.
Y uno de los que han dado la cara ha sido el central Ignasi Miquel. El zaguero ha reconocido que la plantilla no ha estado “a la altura esta temporada”, que va a acabar con el descenso del equipo a Segunda, y espera que puedan “disfrutar” de los cuatro partidos que les quedan en la máxima categoría.
“Nos sabe mal todo lo que estamos viviendo este año porque no hemos estado a la altura”, ha subrayado en unas declaraciones realizadas en los medios del club. “Tenemos que agradecer a la afición, ellos han estado a la altura en todos los partidos tanto en casa como fuera, nos han acompañado en todos los viajes”, añadió.
Eso sí, asegura que lo darán todo en estas jornadas que restan: “Quedan cuatro partidos, vamos a disfrutar de esto aunque sea difícil”. Y la próxima cita será en el Nuevo Los Cármenes frente al flamante campeón de liga, el Real Madrid: "Será un partido muy bonito para todos, esperamos poder acabar con la cabeza lo más alta posible”.
Sobre la derrota del pasado domingo por un claro 3-0 en el campo del Sevilla, lamentó que el cuadro local empezó el partido “mejor y más metido” y que “la primera ocasión que tuvieron" fue gol: “Después no aprovechamos tres ocasiones muy claras para empatar e, incluso, ponernos adelantar en el marcador y cambiar el signo del partido”, agregó.
En este mismo sentido y continuando con la valoración del choque ante los hispalenses quiso matizar algo: “En la segunda parte habíamos hablado de intentar evitar los pases por dentro porque si robaban eran muy verticales. Nos marcaron y a partir de ahí ellos tuvieron un partido plácido y supieron mantener la posesión y dominarnos”.
Sandoval lo ha intentado hasta el final y ha tenido su calculadora en la mano hasta que los números ya le han dado la espalda. Incluso se desplazó hasta Sevilla para ver el derbi y tomar notas de su último rival en directo. Pero la estocada recibida en el Sánchez-Pizjuán les ha dejado sin aliento. Sobre todo, porque deberían hacer un pleno de victorias y que el Mallorca no sumara ni un solo punto, puesto que con los bermellones tienen el 'goalverage' particular igualado pero el general perdido, y recortarle al Cádiz cinco puntos en estas cuatro últimas jornadas. Al cuadro gaditano, por contra, sí le tiene el 'goalaverage' particular ganado.
Y viendo que Real Madrid, Rayo, Celta y Girona son sus últimos rivales, la empresa no puede recibir otro calificativo que el de milagrosa.