Fernando Mateos4 min lecturaLa llegada de José Ramón Sandoval, el tercer técnico de la temporada, ha surtido poco efecto de momento en el Granada. Dos derrotas por la mínima ante Cádiz y Valencia han dejado al equipo a 14 puntos de la salvación con 24 en juego, por lo que en la capital nazarí sólo esperan ya a ponerle fecha a un descenso asumido por todos desde hace semanas.
El reto ahora es volver a armar un proyecto que devuelva al conjunto rojiblanco a LaLiga EA Sports en sólo una temporada, dándose por hecho que habrá de nuevo muchos cambios en la plantilla. Para empezar, hay jugadores cedidos que acaban su vinculación en junio, como Pellistri, Batalla, Piatkowski y Maouassa, los cuatro llegados en el mercado de invierno, además de Vallejo. Pero, además, hay otros que acaban contrato, siendo el caso de Gumbau, Antonio Puertas, Callejón, Raúl Fernández, Torrente y Víctor Díaz, cuya baja federativa ya se tramitó en realidad en enero.
El club, con el director deportivo, Matteo Tognozzi, a la cabeza, deberá tomar una decisión sobre el futuro de todos ellos, al tiempo que también podrían producirse otras bajas de jugadores que no entren en los planes o que sean vendidos para hacer caja.
Pero al mismo tiempo, el Granada CF tiene otro problema con aquellos futbolistas que deben regresar de sus cesiones y que en principio no tienen cabida en el nuevo proyecto en Segunda división, por lo que cruza los dedos para que en algunos casos sus clubes hagan efectivas las opciones de compra que poseen. De lo contrario, regresarán y querrán hacer valer sus contratos, obligando al club nazarí a buscarles nuevas salidas que podrían provocar más pérdidas.
Así, desde el Nuevo Los Cármenes están muy atentos a la situación de jugadores como Shon Weissman, que vio puerta en su debut con al Salernitana y no ha vuelto a marcar, disputando hasta la fecha siete partidos en titular, si bien se ha caído del once en las dos últimas jornadas.
El club italiano, además, no posee opción de compra sobre el israelí, algo que sí tiene el Cardiff City en el caso de Famara Diédhiou, que salvo sorpresa regresará también tras su cesión, pues sólo ha anotado un gol en 10 partidos y tampoco es titular indiscutible.
La buena noticia viene de la mano de Petrovic, que sí se ha convertido en un fijo en la Vojvodina y ha anotado dos tantos, por lo que no habría que descartar que el equipo serbio negocie para quedar son él.
Por su parte, Alberto Soro tampoco goza de un papel protagonista en el Vizela portugués, pese a haber firmado tres goles, mientras que Alpha Dionkou sí es un habitual en el AEK Larnaca de Chipre, quedando claro en su caso que no tiene sitio en el Granada CF, después de ni siquiera haber debutado y acumular ya tres cesiones, aunque le resta un año más de contrato.
Diferente, por su parte, es el caso de Víctor Meseguer y André Ferreira, pues el Valladolid tiene la obligación de comprarlos en caso de ascenso, si bien el primero de ellos es pieza importante y el meta portugués ni siquiera se ha estrenado con la camiseta pucelana.