Un doblete y una asistencia del albanés Myrto Uzuni propiciaron la goleada del Granada CF este jueves ante el Sporting de Gijón por cinco goles a cero. Un papel destacado que mantiene al atacante granadinista como pichichi de Segunda división, corroborando que es uno de los jugadores más completos de la categoría.
Uzuni, que llegó al Granada CF el pasado mercado invernal como refuerzo para intentar salvar a los granadinistas del descenso, se está haciendo notar esta temporada, ya en Segunda. Aunque el albanés y el resto de refuerzos invernales de los nazaríes no fueron suficientes para mantener la categoría, su papel sí está siendo brillante este curso en Segunda, jugando un papel protagónico para tratar de llevar al Granada CF de nuevo a Primera, una categoría que nunca debió de perder.
Y Uzuni sigue creciendo como granadinista, de hecho ya vale más de lo que costó en enero, cuando firmó por los de Los Cármenes hasta 2025 a cambio de algo menos de cuatro millones de euros. Su valor de mercado hoy día (según Transfermarkt) es de cinco kilos, siendo el futbolista de la primera plantilla nazaorí con mayor tasación por la web especializada. Una revalorización que poco a poco va a más, habiendo subido dos millones de euros en la última actualización del citado portal.
Pero no queda ahí la cosa, sino que Uzuni se encuentra, también, en el ‘Top 3’ de los jugadores más valorados de toda LaLiga SmartBank. Con sus cinco millones de euros de tasación, sólo son mejor valorados que el albanés el levantinista Jorge de Frutos (diez millones de euros) y el sportinguista Uros Djurdjevic (6 millones). Un Myrto Uzuni que ya lidera al Granada CF de Aitor Karanka y que poco a poco ha acabado de asentarse en tierras nazaríes, una vez que la adaptación con respecto a su vida en Hungría haya sido algo más lenta de lo esperado.
No es la primera ocasión que Uzuni cambia de país, estando acostumbrado a ello desde muy pequeño. Cuando apenas tenía diez años, el hoy extremo del Granada CF se vio forzado a salir de Albania en busca de una vida mejor. Había dos caminos: cruzas por las montañas a lo largo de tres días con su hermano de tres años en brazos o pagar 8.000 euros para hacer un viaje ilegal, pero seguro. Sus padres optaron por lo segundo y esos 8.000 euros acabarían cambiando la vida de Uzuni y de toda su familia, que se asentaría en Grecia.
"Fuimos para tener una vida mejor. Mi padre trabajaba reformando carreteras mientras que mi madre lavaba platos en un restaurante. Yo tuve también que trabajar. Le ayudaba. Echaba 12 horas y jugaba a fútbol, aunque me tuviera que levantar a las 6:00. Nunca detuve mi sueño”, comentó Uzuni años atrás durante una entrevista con As.
Ya en Grecia intentó probar fortuna en la cantera del Olympiakos, pero no tenía la documentación en regla. Tenía talento y su familia decidió que lo mejor era volver a Albania para que, así, Uzuni pudiera cumplir su sueño de ser futbolista. “Se sacrificaron por mí”, recuerda.
Uzuni tenía tan sólo 16 años y no tardó en destacar, marcando dos goles en su primer amistoso con el Apollonia. “A los seis meses ya me querían todos los clubes”, relataba. Los problemas económicos de su familia estuvieron a punto de volver a frenar su proyección como futbolista, pues tenía que pagar 12 euros al mes para ir a los entrenamientos y cinco para que un autobús lo llevara a los partidos.
Del Apollonia pasó al KF Laçi, con el que llegó a la segunda ronda de la Europa League, cayendo ante el Molde de Solskjaer. Su actuación le llevó hasta el Lokomotiv de Zagreb y tras dos años al Ferencvaros. Estuvo a punto de llegar antes a LaLiga, aunque todo lo truncó el covid: “Espanyol y Mallorca contactaron conmigo en marzo, pero todo se truncó con la pandemia”.
Finalmente, Uzuni acabaría cumpliendo su sueño de jugar en una de las cinco grandes ligas de Europa, como la española, el pasado enero, cuando recaló en el Granada CF. Aunque con su juego no pudo impedir el descenso nazarí, ahora lucha por volver a la elite como granadinista.