Alvaro Arenillas4 min lecturaBryan Gil es uno de los jugadores de moda en el fútbol español. Siendo una de las grandes apuestas del Girona FC para una histórica temporada 2024-25 en la disputarán por primera vez la UEFA Champions League, y teniendo además que hacerse cargo de un ataque en el que ya no están Savinho ni Artem Dovbyk, es obvio que la presión para rendir, y además hacerlo desde el primer momento, es muy alta. ¿Es un problema para el extremo de Barbate? Ni por asomo.
A sus 23 años podemos decir que la vuelta de Bryan Gil, la de ese habilidoso e impetuoso extremo que vimos en la SD Eibar en la campaña 2020-21, está más cerca que nunca antes. Contando con la plena confianza de su entrenador, Míchel Sánchez, ha sido titular en todos los partidos para marcar un gol y disputar 341 minutos de 360 posibles, siendo únicamente superado por el portero Paulo Gazzaniga y los defensas David López, Daley Blind y Miguel Gutiérrez, que han hecho un pleno de minutos en estos cuatro partidos, 360 de 360.
Ya asentado y con un rol protagonista, Gil comentó tras derrotar por 0-2 a su Sevilla FC que a pesar del 'runrun' que despertaron los dos primeros partidos, ante el Real Betis y ante el Atlético de Madrid, el vestuario estaba "tranquilo" porque estaba trabajando bien, y reivindicó que el triunfo en el Sánchez Pizjuán significa "un paso adelante".
Más allá de la evolución de un equipo en el que han cambiado muchos jugadores, lo que es indudable es que el zurdo está en su mejor momento desde hace mucho tiempo. Sí, ya hemos dicho que deslumbró en Ipurua, lo cual llevó a que el Tottenham pagase 25 millones de euros por él. Sin embargo, desde aquel día nada ha terminado de ir bien.
Para ser exactos hablamos de 14 titularidades y 43 partidos con el conjunto londinense, dos cesiones de media temporada al Valencia CF (2021-22) y al Sevilla FC (2022-2023) de por medio, y un regreso a Inglaterra para disputar 230 minutos entre la Premier League y la FA Cup en la 2023-24, menos que esta temporada con el Girona en sólo cuatro jornadas.
Vista tal situación en la que parecía estar plenamente estancado, el club gerundense se cruzó en su camino como "el sitio idóneo" para intentar relanzar su carrera porque se trata de "un equipo joven, con ambición y que deportivamente está creciendo mucho", destacó el propio Gil en una presentación en la que Quique Cárcel, director deportivo de la escuadra de Montilivi, dejó claro que el internacional con España en 2021 aportaría "mucha profundidad y desequilibrio por banda". Sí, hacer olvidar a Savinho son palabras mayores, pero sin duda ha tomado el camino indicado para conseguirlo.