El Girona recibe al Liverpool en Montilivi en la antepenúltima jornada de la Liga de Campeones con el objetivo de, al menos, puntuar si quieren seguir con opciones de entrar entre los 24 equipos que se clasifican para la siguiente ronda. Una derrota complicaría el camino hacia los dieciseisavos de final en su primera participación europea.
El equipo entrenado por Míchel viene de una semana horribilis con varios tropiezos y algún lesionado. Algo que no ayuda a levantar la moral del equipo para un partido vital ante probablemente el mejor equipo de Europa en estos momentos. Los gerundenses llevan desde el pasado 23 de noviembre sin conocer la victoria. Solo la victoria ante el Espanyol en el derbi ha sido la única buena noticia de los últimos cinco partidos. La quinta jornada de la Champions dejó una derrota sorprendente ante un rival menor como el Sturm Graz. La situación se agravó con el empate en La Cerámica, conseguido en los últimos instantes de partido, y la sorprendente eliminación en la Copa del Rey ante el Logroñés en los penaltis. Por último, la derrota por goleada ante el Real Madrid en Montilivi han hecho saltar las alarmas en el equipo de Míchel.
Ahora llega la Champions con el objetivo de pasar página en esta semana para olvidar y el Girona quiere que la ilusión se anteponga al equipo que domina Europa actualmente, el líder la Liga de Campeones. Míchel ha querido instar a sus jugadores a seguir disfrutando de partidos históricos como este para rebajarles presión. Además, el técnico ha recalcado en la rueda de prensa previa como sería su partido perfecto, su sueño ante los ingleses. "Es un partido especial para todos. El club ha llegado aquí por méritos propios, es merecido y hay que disfrutarlo. Será un día muy bonito. Hay que preparar el partido de la mejor manera posible. Me gusta mucho estar ahí, contra el Liverpool. Será especial para mí, claro. Mi sueño es ganar al Liverpool 1-0 con gol de Stuani en el minuto 90″.
Las opciones por las que pasa el partido Míchel las tiene claras si quiere conseguir puntuar. "Necesitas que el rival no esté muy acertado, es la realidad. El otro día competimos muy bien contra el Madrid en 35 minutos y con el 0-1 cambió el partido. El Liverpool es igual, cualquier jugador de arriba te hace daño. Por motivación, ilusión y atmósfera no podemos dejar pasar la oportundiad de ser nosotros mismos. Es un partido histórico.
Míchel deseaba enfrentarse al Liverpool por lo que supuso en su pasado como futbolista. "Era un sueño como jugador. Jugué la UEFA con el Rayo y estuve en cuartos de final y el Liverpool estuvo también. En el Rayo siempre cantaba ‘el año que viene Rayo-Liverpool' y es que era un sueño. Después de clasificarnos para la Champions era un rival que yo quería. Será un día especial para el club, el equipo y la afición. Hemos de disfrutar".