Rafa Cala3 min lecturaUno de los movimientos más sorprendentes del pasado mercado de fichajes, ya a última hora, fue la salida de Iker Almena. El extremo decidió dejar el Girona para aceptar la oferta del Al-Qadsiah de Arabia Saudí. Seducido por la propuesta económica, el extremo siguió el mismo camino que su compatriota Gabri Veiga, pero mientras que el ex del Celta es uno de los mejores jugadores del campeonato de aquel país, a Iker Almena no es que le vaya demasiado bien, por el momento, en la que es su primera temporada con su nuevo club.
Con 20 años, Iker Almena fue uno de los jugadores que llamaron más la atención en las primeras jornadas de esta temporada ya que el extremo fue importante para que el Girona consiguiera un empate en el terreno de juego del Betis tras realizar una gran jugada individual y dar la asistencia que provocó el empate a uno final. Tras ello, Iker Almena tuvo también minutos frente el Atlético de Madrid y después se produjo su traspaso al Al-Qadsiah que pagó 5 millones de euros por su fichaje.
Iker Almena no dudó en aceptar la oferta de Al-Qadsiah y comenzar una nueva aventura allí. Hace unos días, en una entrevista en As, Iker Almena desveló por qué se marchó del Girona y cómo le está yendo en el fútbol de Arabia Saudí. "Estaba contento en el Girona y progresando, pero viendo los fichajes que estaban haciendo y las apuestas del club pensé que mis opciones de tener minutos podrían disminuir. En ese momento surgió la propuesta de Arabia y no lo pensé demasiado. Era la oportunidad de dar el salto definitivo al fútbol profesional y seguir creciendo. Estoy muy cómodo y me alegro de la decisión que tomé".
Con esta situación, Iker Almena firmó un contrato hasta el 30 de junio de 2028 con el Al-Qadsiah en donde no está jugando demasiado. Iker Almena sólo ha disputado 8 partidos y 596 minutos en el Al-Qadsiah durante esta temporada, no habiendo jugado un sólo minutos en cuatro de los últimos cinco partidos que su nuevo equipo ha disputado en la liga de Arabia Saudí.
Este comienzo no es demasiado bueno para un Iker Almena que se había marcado como objetivo el ser convocado asiduamente con la Selección Española sub 21 pero con su poca participación en una competición que está lejos de la élite futbolística tiene pocas opciones de hacerse con un hueco en el segundo combinado nacional.