El fichaje de Claudio Echeverri ha sido uno de los refuerzos más estratégicos del Manchester City en los últimos años. Dicho club se está caracterizando por sus apuestas en jóvenes promesas del fútbol argentino, como ha sido el caso de Julián Álvarez. Hasta el momento, ‘La Araña’ ha sido una gran inversión, formando parte del equipo que conquistó la primera Champions de la historia de la entidad del Etihad.
Ahora, con el joven punta que procede de River, desde los despachos ‘citizens’ quieren ser más cautos. Saben que, si se corre en exceso, su talento se puede perder por el camino. Por ello, desde la perspectiva del City Group, quien ha llevado a cabo este fichaje, se apuesta por cederle a un club que está dentro de su órbita. En este caso, el Girona podría ser el candidato número uno para contar con Echeverri la próxima temporada.
Eso sí, esta cesión estaría pendiente de un condicionante que lo puede cambiar todo. Tal y como informan As y Olé, dos clubes que pertenezcan a una misma propiedad no pueden traspasarse o cederse jugadores. En el supuesto de que el conjunto de Montilivi terminase alcanzando la Champions de la próxima temporada, Echeverri no jugaría en LaLiga. Al menos, en ese momento.
Así lo refleja la normativa de la UEFA, que rige los destinos del fútbol a nivel europeo. “Los clubes no se traspasarán jugadores entre sí, ya sea de forma permanente o cedidos, directa o indirectamente, hasta septiembre de 2025”.
Echeverri, quien no jugaría en el City hasta el 2026, tendría que buscar acomodo en otro lugar si el Girona disputara la antigua Copa de Europa el próximo curso. No solo él, ya que hay que tener en cuenta que varios jugadores pertenecientes al grupo del conjunto inglés y que están cedidos en Cataluña correrían la misma suerte.
Este sería el caso de Yan Couto o Savinho, que están brillando con la camiseta roja y blanca en un curso histórico para el club presidido por Delfí Geli. Ambos, cuyos derechos pertenecen al City Group, se podrían despedir a final de temporada de Montilivi, algo que sería un golpe letal para el Girona, que les tiene como dos de sus grandes referencias.