Alberto Gálvez4 min lecturaAhora que su tercera etapa en el Getafe ha acabado, Quique Sánchez Flores se siente otra persona distinta. No lo ha debido pasar bien o, al menos, eso es lo que se denota de sus últimas palabras. El ya extécnico del conjunto azulón ha concedido una entrevista a Relevo y se ha despachado a gusto contra la institución madrileña y, de paso, le ha lanzado un dardo a José Bordalás, su sustituto en el banquillo.
"Estoy con la sensación de haber dado un paso hacia la libertad, y de saneamiento mental. Cuando estás en un proyecto donde te sientes forzado o forzando, tienes la sensación de atadura y la profesión deja de ser bonita", ha subrayado el preparador madrileño.
Así y en cuanto a la clave de la mala temporada que están firmando los del Coliseum Alfonso Pérez, Quique lo tiene claro: "Mi amigo Alberto Giráldez siempre dice que el momento más importante de la temporada es la pretemporada. Es ahí cuando eliges ser feliz o agonizar. Estuvo mal diseñada, no estoy de acuerdo con esta frase que dicen las direcciones deportivas que cuanto más tarde, mejor se componen, hay que esperar. Me fijo en equipos humildes como Osasuna o Rayo Vallecano, y el día 1 de pretemporada tienen el equipo hecho".
Y es que desde la pretemporada, según ha manifestado el técnico, ha tenido un sentimiento profundo de frustración que incluso le quitaba las ganas de seguir entrenando: "Desde que jugamos contra el Albacete, Cartagena o Elche en pretemporada y éramos peor que todos, con 16 jugadores del filial. Era muy descorazonador. Ahí estás creando una confusión y una debilidad que se transmiten por todas las venas del club. La frustración es lo peor que te puede pasar como entrenador. Y lo siguiente, es que haya un día o dos, que te levantes y digas: 'Y hay que volver a ir'".
También ha tenido palabras para sus detractores, para aquellos que le ven demasiado exigente. Afirma que hace mucho que no llora, pero que no es diferente a los demás: "Soy duro, quizás piensan en mí como alguien distinto por pertenecer a la familia Flores, pero yo he limpiado el ojo vacío de mi padre desde que tengo 10 años, porque lo había perdido. Con 13 años murió un amigo. He vivido experiencias muy duras, me pagué mi colegio con el sueldo del Pegaso, mi madre trabajó mucho para criar a cuatro hijos. He vivido en casa de mis abuelos… A veces me da un poco de miedo pensar lo poco vulnerable que soy a ciertas cosas".
Y entre otras cuestiones que ha abordado, Quique considera que Bordalás en cierta parte es más consentido que él en el Getafe: "Decían que la plantilla estaba mal aprovechada, que el equipo estaba para más… Era una falta de humildad tremenda. Deberíamos haber sido más inteligentes y retirar ese mensaje a tiempo. Yo no puedo hacer lo que Bordalás que en el segundo partido no puso a ninguno de los fichajes. Ya me han estado diciendo que yo no sacaba rendimiento a los maravillosos fichajes que se habían hecho. Si llego a hacer lo de Bordalás, sé que al día siguiente estoy fuera. Se me tomaría como un atentado al club".