En paro desde que el pasado verano decidió marcharse del Wolverhampton en plena pretemporada, por diferencias con los dirigentes en materia de fichajes y planificación después de salvar al equipo del descenso, Julen Lopetegui tiene entre ceja y ceja volver a entrenar en la Premier League.
El propio técnico vasco ha reconoció que han sido varias las ofertas que ha rechazado en los últimos meses. Sonó para el Villarreal tras la destitución de Quique Setién y también estuvo en las quinielas del Olympique de Lyon francés. Incluso, el Sevilla tanteó su regreso tras la salida de José Luis Mendilibar, pero del Asteasu lo tiene claro.
Se ha quedad a vivir en Inglaterra y está aprovechando este periodo alejado de los banquillos para empaparse del fútbol y la cultura británicos, llevando a cabo diferentes reuniones y visitas a diversos estadios y centros de entrenamientos. Ni siquiera un ofertón de Arabia Saudí le ha hecho cambiar de idea. Tampoco el interés del Besiktas turco.
Pero el objetivo del ex seleccionador nacional de emular a otros como Unai Emery, Mikel Arteta o Andoni Iraola pasa, en estos momentos, por ser el relevo de alguno de los actuales técnicos del campeonato inglés que están en la cuerda floja, como era el caso de Steve Cooper.
El Nottingham Forest era uno de los clubes que tenía en su agenda a Lopetegui y, finalmente, su propietario, Evangelos Marinakis, ha decidido cambiar de entrenador dada la mala marcha del equipo, que ocupa la decimoséptima posición. Pero el elegido ha sido otro viejo conocido de LaLiga: Nuno Espírito Santo.
El preparador portugués, ex del Valencia, ha sido confirmado como nuevo técnico del conjunto de Nottingahm tras firmar un contrato de dos años y medio, hasta junio de 2026, con lo que regresa a una Premier League en la que ya dirigió al Wolverhampton y al Tottenham, después de ser despedido el pasado mes de noviembre por el Al-Ittihad saudí.
De este modo, se cierra una puerta para el ex del Real Madrid y el Sevilla, que tendrá que seguir esperando una oportunidad. En este sentido, en las últimas semanas también ha sido colocado en la órbita del Crystal Palace y, especialmente, en la del Manchester United. En Old Trafford, Erik ten Hag está en la cuerda floja tras su eliminación de toda competición europea, pero el empate de la pasada jornada ante el Liverpool en Anfield le ha concedido una vida extra.