El último escándalo de Balotelli y el milagro que salvó varias vidas

El italiano ha sufrido un accidente de tráfico del que ha podido salir andando por su propio pie. Eso sí, según apuntan varios medios italianos, se negó a realizar la prueba de alcoholemia y los agentes le retiraron el permiso de conducir

El último escándalo de Balotelli y el milagro que salvó varias vidas
Mario Balotelli, ejercitándose con el Adana Demirspor, en Turquía. - @Adana Demorspor
Alberto GálvezAlberto Gálvez 3 min lectura

Mario Balotelli vuelve a ser noticia y no precisamente por algún gol suyo o algún destello de calidad futbolística. El delantero italiano ha sufrido un accidente la pasada noche en Italia. Concretamente, en la vía Orzinuovi de Brescia, alrededor de las 20:00 horas.

El exariete de Inter de Milán, Manchester City, Liverpool y Milan, entre otros, destrozó su coche, un Audi Negro Q8, contra un bordillo. Saltaron todos los airbag, la rueda anterior izquierda acabó a varios metros, y quedó muy poco de la parte delantera y de la puerta del pasajero. Lo que se conoce como un siniestro total.

Según informaron varios medios italianos, como La Gazzetta dello Sport, pudo salir por su propio pie del coche y, según Brescia Oggi, el jugador del Adana Demirspor habría rechazado el control de alcoholemia de la policía, motivo por el que fue denunciado.

Pero la noticia es más llamativa aún porque, durante la mañana, había hecho unas declaraciones en TvPlay, en las que afirmaba su deseo de regresar a la selección italiana: “Si estoy bien, sigo siendo el delantero italiano más fuerte. Sigo esperando en la Eurocopa”.

Como se puede observar en el video, el de Palermo necesitó de asistencia médica al salir tambaleándose. Ahora queda por saber qué lesiones ha sufrido y si alguna de estas le impedirá poder ejercer su profesión o le mantendrán alejado un tiempo de los terrenos de juego. Cabe recordar que Balotelli se encontraba en Italia, precisamente por estar recuperándose de una lesión.

Lo que sí es cierto es que, afortunadamente, el accidente quedó sólo ahí, en un coche destrozado. No hubo ningún otro afectado ni lesionado. El bordillo de esa acera, quizás, evitó lo que podría haber sido un desastre mayor con víctimas de por medio.

Al negarse a realizar el control de alcoholemia, será sancionado como si hubiese dado positivo más allá de los límites permitidos. Asimismo, las autoridades informaron que le retiraron su licencia de conducir. El atacante italiano fue llevado a casa por su hermano Enock Barwuah, quien regresaba de un entrenamiento con el equipo Eccellenza (Rovato), y por varios amigos.