Estadio Deportivo4 min lecturaSe cumple este domingo una semana del fatal accidente de Sergio Rico en la aldea de El Rocío, cuando fue coceado en la cabeza y el cuello por un caballo. Algunos testigos presenciales intervinieron estos días en diferentes programas del corazón, que se están ocupando del asunto por el carácter mediático del protagonista y su mujer, la influencer Alba Silva, que se hacía eco por cierto en su perfil de Instagram de todos los mensajes de apoyo y cariño que están recibiendo, especialmente del mundo del deporte. La mejor noticia, en estos casos, suele decirse que es la ausencia de noticias. El último parte médico del portero data de este viernes, incidiendo en que sigue en "situación de estabilidad clínica dentro de la gravedad de sus lesiones", sin evolución gracias a Dios negativa. De hecho, medios como 'La Vanguardia' hablaban de una leve mejoría, aunque nadie se atreve a asegurarlo. Este lunes, seguramente, habrá otro pronunciamiento público de los médicos o de sus allegados.
Hasta entonces, todos guardan la debida cautela, rezando y cruzando los dedos para que el canterano sevillista, muy recordado por supuesto antes, durante y después de la celebración de la séptima Europa League del equipo de su corazón, ofrezca una sorpresa en positivo más pronto que tarde. El hematoma craneal que sufrió debe ser reabsorbido y desaparecer por sí solo, por lo que el jugador permanece bajo los efectos de la sedación y con monitorización continua, atendido de modo multidisplinar por el equipo de Medicina Intensiva y otros especialistas del Hospital Universitario Virgen del Rocío de la capital hispalense. Con su familia natural y política cerca, así como sus amigos y compañeros interesándose continuamente por él, Sergio está en boca de todos igualmente en París, muy lejos de su Sevilla natal. Porque el PSG, con el que tiene contrato hasta el 30 de junio de 2024, está empujando para que nadie le olvide.
Primero fue su compatriota Carlos Soler el que accedía este sábado a las instalaciones del club vestido con una camiseta del cancerbero de 29 años, al revés para que su nombre se leyera en su pecho, mientras que luego se desvelaba que los dirigentes franceses, que decidieron recientemente suspender 'sine die' la cena anual de gala que promueve su Fundación como broche a cada temporada, han ordenado que en el último encuentro de la 22/23 en casa y en términos globales, que comenzó a las 21:00 horas de este 3 de junio en el Parque de los Príncipes, todos sean Sergio Rico. De hecho, a los dorsales habituales de cada jugador ante el Clermont Foot 63 está acompañando la nomenclatura del profesional español. En el minuto 16, que coincidió con el tanto de Sergio Ramos y la correspondiente dedicatoria, se desplegó un enorme tifo en su honor en la grada, recordando su dorsal. Un bellísimo gesto que demuestra el amor y el respeto que su gremio y todos los que tienen sensibilidad están experimentando a favor del meta.
