Santi Cazorla cumplirá 39 años el próximo mes de diciembre y está sin equipo desde que el pasado 30 de junio acabase su contrato con el Al Sadd catarí. Un club al que llegó por petición de Xavi Hernández, el entrenador en aquel momento, y en el que ha mostrado sus grandes cualidades con el balón en las tres últimas temporadas.
El de Lugo de Llanera es un futbolista con una carrera extensísima y han sido varios los equipos que lo han disfrutado: Villarreal, Recreativo, Málaga, Arsenal y Al Sadd. A estos cinco clubes habría que sumarle la Selección Española, con la que ganó dos Eurocopas en 2008 y 2012, el Mundial de 2010 se lo perdió por una lesión, un castigo demasiado presente en su carrera, sobre todo en su etapa en Londres.
También hay que recordar que en el Villarreal estuvo en dos etapas y que su primer club es el Real Oviedo, aunque siendo bastante joven puso rumbo a Castellón. Ahora su dilatada carrera podría estar llegando a su fin. Según Lorena González, de Relevo, el asturiano barajaría dos opciones en este momento: una oferta de un equipo de Catar o retirarse. Cazorla se estaría planteando dejarlo si no llega una oferta que le satisfaga.
Hace pocos días anunciaba que deja el fútbol su amigo David Silva y ahora él podría seguir sus pasos. Además, explica la misma fuente que no hay posibilidades de que fiche por el Real Oviedo, equipo en el que se inició. También comenta que Santi Cazorla se entrena en Catar a la espera de resolver su futuro mientras su familia está en España.
Al terminar su participación en LaLiga Promises, un torneo de alevines en el que incluyeron a una leyenda de cada club, el asturiano comentó a Marca que quería terminar de recuperarse de unas molestias y luego decidiría qué hacer. El tiempo va pasando y las competiciones están cada vez más cerca de comenzar, por lo que su decisión final podría estar más cerca. Cazorla ya se lo estaría pensando y valoraría el poder poner fin a una carrera brillante en la que ha regalado muchas tardes de gloria a todos los aficionados de los equipos en los que ha estado.
Santi es un jugador querido y admirado por compañeros y seguidores que podría estar cerca de poner el fin a su carrera. Por ahora sigue esperando alguna oferta de un equipo catarí, si no llega podría colgar las botas. Lo bueno para él es que lo haría habiéndose despedido en el campo y no por las lesiones que tanto lo machacaron. Incluso los médicos le dijeron que tendría difícil jugar con sus hijos y no solo lo consiguió si no que volvió a jugar al fútbol a un gran nivel y se puso de nuevo la camiseta de la Selección Española. Dentro de muy poco sabremos cuál es su decisión.