Alejandro Sáez5 min lecturaComienza a sonreír Ansu Fati en Inglaterra, donde poco a poco va recuperando sensaciones y cumpliendo con las expectativas puestas sobre su figura cuando el pasado verano marchó en préstamo al Brighton.
Ansu Fati sigue siendo el objetivo culé para el próximo verano. En el Camp Nou ya no lo consideran estratégico para el futuro del club y la idea, como meses atrás, sigue siendo venderlo a un buen precio y, así, ayudar a paliar las delicadas cuentas del conjunto azulgrana, que lleva dos temporadas sobreviviendo gracias a las palancas de Laporta, su presidente. Para ello, lógicamente, Ansu Fati tiene que volver a explotar como futbolista en la Premier, demostrando que las lesiones que han frenado su proyección han quedado atrás y que poco a poco vuelve a ser la estrella que apuntaba ser cuando debutó con el conjunto culé.
El Brighton se antojaba ideal para Ansu Fati, por su estilo de juego y por su entrenador, Roberto de Zerbi, quien lo recibió con los brazos abiertos tras varias semanas poniendo de su mano para acabar de convencerlo, pues la prioridad del entorno de Ansu Fati, con su padre a la cabeza, era volver al Sevilla FC, en el que se había criado como futbolista hasta dar el salto a La Masía. Los de Nervión, sin embargo, no podían hacerse cargo de su cesión, por lo que finalmente acabaron en la Premier.
No le ha resultado del todo sencillo, pero poco a poco va completando el plan con el que aterrizó en Inglaterra, que no era otro que convertirse en titularísimo para De Zerbi en un once en el que prácticamente todas las demarcaciones en las que puede jugar estaban cubiertas por un hombre de peso. Pese a ello, Ansu Fati ha tenido oportunidades desde que llegó, participando en nueve partidos con el Brighton hasta el momento y habiendo firmado tres tantos. Unos números que cobran aún más sentido si se tiene en cuenta que las tres dianas han llegado en los seis últimos partidos en los que ha participado. El último de ellos, el pasado jueves en Europa League, donde el Brighton se impuso sobre el Ajax por 2-0.
“Fati jugó muy bien contra el Ajax, pero creo que puede mejorar aún más y jugar mejor”, dijo De Zerbi sobre el todavía jugador azulgrana, de quien siguió argumentando el momento de forma en el que vive: “Su concentración está en disfrutar y encontrar el mismo entusiasmo que tuvo en la primera parte de su carrera”. Una clara alusión por parte del técnico italiano a la rotura de menisco interior de su rodilla izquierda que Ansu Fati sufrió en noviembre de 2020, sufriendo varias recaídas luego hasta el punto de pasar cuatro veces por quirófano. Un calvario tras el que Ansu Fati volvió sin esa chispa que había demostrado anteriormente a todos.
Ahora, todos vuelven a estar pendientes de Ansu Fati. Desde Xavi Hernández, quien no vería con malos ojos su vuelta si demuestra volver a ser el que era, hasta el propio Barça, con Deco, su director deportivo, a la cabeza. Sacar tajada con su transferencia, en cualquier caso, sigue siendo el plan principal. Y parece que no le iría mal al Barça, encontrándose el joven futbolista en la órbita del fútbol de Arabia Saudí.
Con contrato con el Barça hasta 2027, en el entorno del futbolista no verían con malos ojos el cerrar un contrato suculento en el fútbol saudí antes de que su valor de mercado caiga más de lo esperado. Y con ese contrato en la mano, luego, plantearse futuros escenarios en función de su rendimiento. El Barça, por el momento, no lo ve tan claro y entiende que es demasiado pronto para pensar en el mercado de verano. Ansu Fati parece que comienza a responder sobre el campo y en el Camp Nou no quieren dar ningún paso en falto tan pronto.