José Antonio Rivero3 min lecturaQue Arabia Saudí quiere crecer mundialmente a través del fútbol no es ningún secreto. El país árabe ya sedujo a Cristino Ronaldo con su fichaje por el Al Nassr, convirtiéndolo en el futbolista mejor pagado de la historia. Los saudíes también han realizado ofertas a otras grandes estrellas del fútbol mundial como Luka Modric o Sergio Ramos, siendo Jose Mourinho el último en ser tentado por la fortuna saudí.
El entrenador portugués, actualmente en la AS Roma, tendría sobre la mesa una oferta de 120 millones de euros por dos temporadas, según informó 'Corriere dello Sport'. El técnico luso cobraría 60 millones por año y las conversaciones entre el país saudí y el agente de Mourinho ya se habrían producido.
Igual que en la oferta que le hicieron a Modric, Ramos o Benzema, es el propio país quien negocia y da a elegir el destino a las figuras. En el caso de Mourinho, el portugués podría elegir entre la selección, ya que Hervé Renard la dejó para entrenar a la selección francesa de fútbol femenino, el Al Nassr de Cristiano Ronaldo o el Al Ahli, actual líder de la liga saudí.
El nombre de Jose Mourinho ha estado relacionado con varios equipos en los últimos tiempos, siendo el PSG el nombre con el que más se ha rumoreado, aunque incluso se habló de un posible regreso al Real Madrid si Ancelotti se iba a entrenar a Brasil.
A sus 60 años, el luso tiene contrato hasta 2024 con la Roma, a quien ha dirigido durante 95 partidos, con un balance de 50 victorias, 19 empates y 26 derrotas, consiguiendo una UEFA Conference League, y quien no le pondría muchas trabas para salir.
Philippe Coutinho es otro de los jugadores sobre el que existiría interés por parte de Arabia Saudí. Según medios británicos, el centrocampista brasileño, que no cuenta con minutos en el Aston Villa de Unai Emery, tendría una oferta para aterrizar en el fútbol saudí.
El brasileño, que cumplirá 31 años en junio y tiene contrato hasta 2026, lleva sólo 918 minutos de juego esta temporada, por lo que su rendimiento y relevancia en la Premier League ha disminuido notablemente desde que volviese el pasado verano a cambio de 20 millones de euros.