La jornada futbolistica en la Premier League ha vivido un capítulo completamente surrealista que se ha hecho viral de inmediato en las redes sociales y que ha provocado muchas reacciones. Un incidente en el que el protagonista ha sido nada más y nada menos que una figura tan carismática como Jürgen Klopp.
El técnico alemán ya estuvo en los focos el viernes por el 'palo' que le propinó a la UEFA y a la FIFA a propósito del veredicto judicial sobre la Superliga, pero lo de hoy, sin duda, ha sido más llamativo si cabe, ya que Klopp terminó por los suelos en el partido entre el Liverpool y Arsenal en Anfield y ha lesionado a uno de sus futbolistas, más concretamente a Tsimikas, que se vio obligado a retirarse del terreno de juego.
Todo sucedió a la media hora, en el minuto 32 del partido, cuando el 'gunner' Bukayo Saka, en una acción en la banda de los banquillos, propinó un empujón al lateral griego para hacerse con el balón con la mala suerte que lo hizo justamente donde se encontraba el entrenador de los Reds. El heleno impactó con Klopp, que trató de mantenerse en pie y que terminó cayendo encima de Tsimikas, con consecuencias nefastas para el carrilero.
Fue una caída tremendamente aparatosa que generó una gran preocupación en los aficionados, que se quedaron totalmente atónitos con lo sucedido e inqietos por el estado físico del futbolista local. No en vano, lejos de quedarse en una anécdota, Tsimikas se llevó la peor parte en un accidente fortuito que le provocó fuertes dolores en la clavícula.
Tras el patrdo se le realizó una primera exploración y se confirmaron rápidamente los peores augurios, pues Tsimikas se fracturó la clavícula derecha y causará baja durante un periodo de tiempo que oscilará entre las 6 y las 12 semanas.
Klopp, una vez recuperado del susto, se vio forzado a realizar un cambio y dar entrada Joe Gómez para ocupar una posición que no es la suya, pero a la que deberá acoplarse ante la ausencia de Robertson y la larga baja del griego.
Todo ocurrió cuando el marcador registraba un empate a uno después de que Magalhães adelantara a los londinenses y Salah estableciera el empate. El incidente cortó el ritmo del partido y el resultado ya no se movería con reparto de puntos y una lesión grave en los Reds con Klopp como causante involuntario.
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