Con el estilo inconfundible de Andoni Iraola, el Bournemouth logró sorprender al Manchester City en un partido que marcó el fin de la racha invicta de 32 partidos del equipo de Pep Guardiola en la Premier League. Gracias a una estrategia táctica impecable y a los goles de Semenyo y Evanilson, el equipo del técnico español dominó durante setenta minutos, despojando al City de su posición de liderazgo y dejándolo contra las cuerdas.
En otro enfrentamiento memorable contra un grande, Iraola volvió a demostrar su talento. Hace dos jornadas, su equipo ya había vencido al Arsenal de Mikel Arteta por 2-0, utilizando una estrategia similar: una presión alta, líneas adelantadas y un juego sin especulación. Su Bournemouth se ha convertido en un equipo aguerrido, especialmente en el Vitality Stadium, que es ahora un terreno hostil para cualquier rival, sin importar su nivel.
El Manchester City, a pesar de la oportunidad que tenía para distanciarse en puntos tras la derrota del Arsenal ante el Newcastle, se encontró con un Bournemouth que, bajo la dirección de Iraola, se mantuvo firme con su propuesta sobre el terreno de juego.
El Bournemouth comenzó el partido sin complejos, presionando intensamente al City desde el inicio. Apenas transcurridos diez minutos, el gol de Semenyo, tras una gran jugada de Milos Kerkez por el costado izquierdo, dio la ventaja al equipo local. Aunque Ederson fue agrandándose con varias paradas que mantuvieron a los cityzens en juego, la resistencia del guardameta brasileño solo sirvió para evitar una mayor diferencia en el marcador.
Atrapado en el mediocampo y sin opciones por las bandas, el City se mostró frustrado ante un Bournemouth que no cedía terreno. La defensa del equipo de Iraola se mostró sólida, y el Manchester City apenas tuvo oportunidades claras; solo un disparo de Erling Haaland, al filo del descanso, se acercó al arco defendido por Mark Travers.
Al iniciar la segunda mitad, la situación no cambió. El City seguía sofocado por la presión del Bournemouth, que no le daba respiro. Con el segundo tanto de Evanilson, tras una asistencia de Kerkez de nuevo, la ventaja de los 'cherries' se consolidó y el equipo se vio aún más seguro en su juego. Aunque el equipo de Guardiola recortó distancias en los minutos finales con un cabezazo de Josko Gvardiol, la defensa local, liderada por Travers y sostenida por el buen planteamiento de Iraola, evitó el empate.
El Bournemouth no solo mantuvo su ventaja, sino que estuvo a punto de ampliar el marcador con un disparo de Tavernier. Aunque el Manchester City buscó el empate hasta el último momento, el equipo de Iraola consiguió tres puntos históricos, desbancando al City y dándole al Liverpool la oportunidad de tomar el liderato.