Pocas pasiones mayores que las de celebrar un gol de tu equipo o una victoria del mismo. Las celebraciones de estos hechos dejan momentos para la historia y más cuando se producen con épica o en los últimos minutos. Hay celebraciones de goles que están vinculadas a movimientos de tierra o que más bien lo han provocado, también hay festejos de victorias que han acabado con que 9 meses después hubiese una subida en la natalidad. En este caso, los claros ejemplos en España son la victoria en el Mundial de 2010 o la remontada del Barcelona al PSG en Champions, este último hecho provocó la llegada de muchos niños al mundo en la ciudad condal.
La alegría de un gol, de una victoria o de un tanto que dé un triunfo en los últimos instantes es un hecho muy pasional. Una celebración de la que es difícil no levantarse del sofá, de la silla o saltar para el que los nervios no lo dejen estar sentado. Algo así debió ocurrir con los seguidores del Sporting de Portugal, porque a veces un gol puede significar solo tres puntos, pero no lo son. Es difícil de explicar como algo tan simple puede provocar tanta efusividad e incluso repercusión en el lugar en el que se vive, pero así es.
La euforia de los aficionados del Sporting de Portugal tras un gol en el último suspiro que supuso la victoria por 3-2 ante el Vizela fue tan grande que incluso generó pequeños terremotos en Lisboa, según han revelado especialistas. El gol, marcado por el portugués Paulinho en el minuto 99, provocó una reacción de los seguidores en el estadio que causó "pequeños seísmos de origen 'artificial'", informó la Sociedad Portuguesa de Ingeniería Sísmica (SPES).
La vibración de las celebraciones fue registrada a 600 metros del Estadio José Alvalade, la casa del Sporting, en un sismómetro artesanal, y también fue detectada en sensores del Instituto Portugués del Mar y de la Atmósfera (IPMA), según las mismas fuentes.
El partido contra el Vizela, jugado el 12 de agosto, empezó bien para los 'leones', con dos goles del sueco Viktor Gyökeres en los minutos 14 y 15, que también aparecieron en los sensores del IPMA. El Vizela empató en los minutos 76 y 77, pero Paulinho evitó el desastre justo antes del final y aseguró la victoria del Sporting en la primera jornada del campeonato portugués.