Brasil fue el primer país en aplicar el videoarbitraje en todas sus categorías profesionales, pero también en el que más han descargado su furia los aficionados contra el VAR. Ya en 2021, con la tecnología en pruebas en varios países del mundo, ultras del Gremio reaccionaron a un gol anulado derribando la estructura que sostenía el monitor en el que los árbitros tienen que revisar las acciones polémicas, algo similar, pero sin tanto daño material, a lo que hizo Iago Aspas en los estertores del Celta-Sevilla tras el penalti señalado e invalidado después de Navas a Douvikas, acción que no ha sido sancionada al no recogerla el colegiado principal, Hernández Hernández, en el acta de aquel encuentro. El mismo Arena de Porto Alegre fue escenario el pasado domingo de un nuevo incidente, en esta ocasión protagonizado por el director de fútbol del equipo visitante, Alessandro Nunes.
Las cámaras de TV registraron a la carrera cómo el alto ejecutivo del Corinthians intentaba entrar por la fuerza al equivalente español de la sala VOR, que en el país suramericano se habilita en los propios estadios normalmente. Al verse descubierto, tanto el protagonista como los miembros de seguridad intentaron impedir que siguiera la grabación, hasta el punto de que, según denuncian algunos periodistas, les fueron sustraídos sus teléfonos móviles. El caso es que los paulistas, que jugaban con uno menos desde el minuto 10 por la roja directa a Bruno Méndez, lograron imponerse por 0-1, merced al tanto de Ángel Romero cumplida la media hora de partido, a un anfitrión que terminó igualmente con diez, pues sería expulsado en la recta final el central Bruno Alves. En los compases iniciales, un aparente penalti no señalado sobre el lateral foráneo Matheus Bidu ocasionó la trifulca.
"Uno de nuestros guardias de seguridad terminó quitandole su teléfono a Éverton Leite. Desgraciadamente, ambos estábamos en una zona que no estaba permitida, tanto su compañero como yo. Había una zona reservada para el VAR. Fui a protestar por la incompetencia de Rafael Traci (jefe del videoarbitraje en ese encuentro) al no haber ayudado al árbitro de campo en un penalti escandaloso como ése. Sé que no es un comportamiento decente para un directivo del fútbol, para alguien en una estructura profesional... Pero necesitaba hablar. Fue una forma de protesta. No hubo ningún ataque a nadie. La puerta estaba cerrada. Si hubiera estado abierta, seguramente habría hablado con alguien, tal como hice con el árbitro del partido, incluso de una manera más dura. Pido disculpas", explicaba después Nunes a la emisora del periodista en cuestión, aunque donde intentaba acceder no contenía personal, sino sólo los equipos audiovisuales.
Aunque el audio del VAR, divulgado después por la CBF como pretende hacer LaLiga en España, desvela que el colegiado principal, Rodrigo Pereira, dijo que Bidu "siente el contacto y se tira", el equivalente brasileño a Luis Medina Cantalejo, Wilson Seneme, le lleva la contraria y anuncia que fue penalti, como reclamaba (de manera improcedente) el Corinthians: "Hay una cámara muy buena que fue poco utilizada por el equipo VAR. Vemos el cuerpo del atacante siendo lanzado hacia adelante. Cuando lo tocan, su cuerpo es lanzado. Está en una acción y su cuerpo es lanzado. Él lo valora. Es obvio que lo valora, pero hay infracción. No podemos confundir las cosas. La carga del defensa es absolutamente imprudente".