La destitución de Jorge Sampaoli como técnico del Sevilla no ha mermado el prestigio que tenía a nivel internacional. El técnico argentino no ha tardado ni un mes en encontrar un nuevo destino. Y ése no ha sido cualquiera, sino que acaba de firmar con el club más poderoso de Suramérica: el Flamengo.
El actual campeón de la Copa Libertadores ha comenzado el año de forma desastrosa, perdiendo la final de la Supercopa, cayendo en semifinales del Mundial de Clubes, ante el Aucas en su debut en la Copa Libertadores 2023... La derrota en la final de la Taca Guanabara (Torneo de Río de Janeiro) hace unos días ante el Fluminense, su eterno rival, fue la puntilla para el técnico Vítor Pereira, que ha sido sustituido y reemplazado por el ex del Sevilla FC.
"El club Flamengo comunica que llegó a un acuerdo con el técnico Jorge Sampaoli para gestionar al equipo de fútbol profesional hasta el 31 de diciembre de 2024", publica el club de Río de Janeiro a través de un breve comunicado oficial, en el que confirma su fichaje.
Sampaoli se hace cargo de uno de los equipos más potentes de Brasil, que está sumido en una grave crisis, pero que tiene tiempo para reaccionar en la Libertadores y que ahora empieza el Campeonato Brasileño (Brasileirao), donde parte desde cero. De hecho, apenas tendrá unos días para debutar, ya que se enfrenta este mismo domingo ante el Coritiba.
Jorge Sampaoli se hace cargo de un plantel que, entre otros, tiene a Gabigol, al mundialista Pedro, a Gerson -pretendido por el Sevilla en el mercado invernal, a De Arrascaeta, a Arturo Vidal, a Rodrigo Caio, a David Luiz... un equipazo, del que tendrá que sacar lo mejor.
Y que también, a lo largo de los últimos meses, ha tentado al exsevillista Isco Alarcón. De hecho, tras írsele cerrando puertas en Europa después de su frustrado fichaje por el Unión Belín, al jugador malagueño le quedaron como únicas opciones irse a la MLS o firmar por un Flamengo que trataba de dar, con él, un golpe encima de la mesa.
Lógicamente, su fichaje, como el de Sampaoli, llevaba implícito un contrato hasta final de su temporada, que acaba en diciembre, y eso condicionaba el futuro del malagueño en Europa, por lo que ha decidido esperar a final de temporada y seguir jugando, al menos por ahora, en alguna de las grandes ligas.
Sampaoli, que aún mantiene un conflicto con el Sevilla por el finiquito de su contrato, tendrá que tirar con lo que tiene en el Flamengo, que no es poco.