La Primeira Liga de Portugal cuenta con una nutrida presencia de jugadores españoles. Entre sus máximos goleadores, de hecho, se encuentran Rafa Mújika, que suma 13 tantos con el Arouca, o Héctor Hernández, que lleva 10 con la camiseta del Chaves.
Pero, además de destacar en la faceta anotadora, hay un futbolista nacido en España que ha sido el mejor centrocampista de la Liga Portugal en el mes de enero. Se trata de Rodrigo Zalazar, hijo del ex futbolista José Luis Zalazar, motivo por el cual nació en Albacete, aunque es internacional absoluto con Uruguay, al igual que lo fue su padre, que también jugó en el Cádiz, el Espanyol o el Racing de Santander.
Es la primera vez que el albaceteño recibe este honor en su primera temporada en el Sporting de Braga, uno de los clubes con mayor presencia de futbolistas españoles, pues en sus filas también están Abel Ruiz, Víctor Gómez, Adrián Marín y Álvaro Djaló, que podría tener ya cerrado su fichaje con el Athletic Club de cara a la próxima temporada.
Zalazar recibió el 18,52 % de los votos emitidos por los técnicos de los equipos participantes y se impuso a los portugueses Pedro Gonçalves (del Sporting de Portugal, con el 17,04 %) y João Neves (del Benfica, con el 15,56 %), según informó la Liga en un comunicado.
Según la organización del campeonato, el uruguayo de 24 años "está siendo determinante en la campaña realizada por el Braga", donde se ha convertido en "una pieza clave en el mediocampo del equipo dirigido por Artur Jorge", que va cuarto en la clasificación.
En concreto, el pasado mes de enero marcó un tanto y dio una asistencia en cuatro partidos ligueros disputados, y en todas las competiciones suma ya cuatro goles y ocho pases de gol en 34 encuentros oficiales.
El centrocampista charrúa dio sus primeros pasos en los escalafones inferiores del Albacete, donde su padre fue un mito en los años noventa, pasando luego por la cantera del Málaga. Allí estuvo cuatro temporadas, hasta que en 2019, con 19 años, puso rumbo a Alemania.
Fue el Eintracht de Frankfurt el que se hizo gratis con sus servicios, aunque no llegó a jugar en sus filas, cediéndolo consecutivamente al Korona Kielce polaco, al St. Pauli, donde firmó seis goles y seis asistencias, y al Schalke 04, con el que consiguió ascender a la Bundesliga.
El conjunto de Gelsenkirchen acabó firmándolo por 1,5 millones de euros en 2022 para traspasarlo un año después a cambio de 5 millones al Braga, donde rápidamente se convirtió en un fijo del grupo que recientemente se proclamó campeón de la Copa de Liga.