Alejandro Sáez3 min lecturaTristemente, Jenni Hermoso se convirtió, sin buscarlo, en protagonista tras la consecución del primer Mundial de fútbol femenino para España. Y no precisamente por lo que ocurrió sobre el campo, sino todo lo contrario, por lo que se vivió durante la celebración, siendo víctima de un "piquito consentido" (en palabras de Rubiales) por el que en ese momento era el presidente de la Real Federación Española de Fútbol, Luis Rubiales.
Lo acontecido después y el tsunami mediático y legal que ocasión ese controvertido beso es conocido por todos a estas alturas de la película. Lo que no es tan conocido, sin embargo, es que Jenni Hermoso habría monitorizado lo acontecido. La futbolista madrileña siempre ha sido protagonista sobre el terreno de juego, y desgraciadamente en los últimos meses también lo ha sido fuera. Tratándose de una jugadora de su nivel, no es de extrañar, también, que la ex del Barça acostumbre a ponerse en manos de los mejores, como es el caso del nutricionista y farmacéutico Javier Fernández, tal y como revela Relevo. Y es que el citado experto navarro se ha convertido en pieza clave de su preparación a lo largo de los últimos tres años, llevando a cabo una innovadora práctica con Jenni Hermoso durante el Mundial de Australia y Nueva Zelanda.
Se trata de un parche para diabéticos que la '10' de España habría llevado durante todo el Mundial, no sólo sobre el terreno de juego; sino también fuera. Jenni Hermoso no es diabética, pero este tipo de parches tiene una importantísima utilidad a la hora del análisis físico de deportistas. De hecho, no es Jenni Hermoso la única deportista que los usa, como es el caso del maratoniano Eliud Kipchoge o el campeón olímpico de triatlón Kristian Blummenfelt.
El sensor, de tamaño pequeño y bastante discreto está en contacto con la piel, midiendo de manera automática la concentración de glucosa en el liquido intersticial del organismo. Cuando salta al campo, ella activa el parche y el nutricionista puede seguir minuto a minuto su evolución, pudiendo comprobar cómo le afecta la emoción del partido a la glucosa o qué suplemento necesita en el descanso. Un análisis completo y casi al instante que Jenni llevó durante el Mundial a lo largo de las 24 horas del día, con un control más exhaustivo al tratarse del torneo que era.
Un arma secreta que, sin lugar a dudas, también daría buena prueba de cómo le afectaría a Jenni Hermoso y su organismo el estrés ocasionado por todo el revuelo y la polémica generada por el beso de Rubiales.