Avanza, pero a paso de tortuga. La planificación del Sevilla está pendiente de lo que ocurra con el futuro de su director deportivo, Monchi, y, mientras tanto, se encuentra en 'stand by'.
Por algo el León de San Fernando aconsejó, en su reunión del lunes, que Fernando Navarro fuera su sustituto. A las alturas que estamos de temporada, ya están decididos los puestos a reforzar, se han hecho las listas de sustitutos y, en muchos casos, ya se han avanzado los tanteos y negociaciones. Y excapitán sevillista, mano derecha de Monchi, está al tanto de todas ellas y la sucesión, al menos este verano, no sería traumática.
Uno de los puestos a cubrir será el de delantero centro. Se prevé que Rafa Mir busque una salida -el Celta lo tiene apuntado, más si se va Paciencia- e, incluso, no se descarta que algún club poderoso venga a por En-Nesyri. De ahí la necesidad de que esta lista, al contrario que otras, esté abultada y, siendo la posición más cara de cubrir, haya avances antes del mes de julio. O eso, o esperar a los 'descartes' del último día para lograr precios o jugadores de nivel asequibles.
Santiago Giménez, una de las opciones preferidas, cada día parece más complicado, dada su gran temporada y los rivales que han aparecido. Taty Castellanos, por el que ha preguntado, cuesta 15 millones y Benfica y West Ham también están en la pelea. Alfredo Morelos podría llegar gratis, pero también cuenta con rivales de la Premier League. Y siempre está alguien que este verano aún no ha aparecido, pero que gusta mucho en Nervión: Lucas Boyé.
El delantero argentino no ha vivido la mejor temporada con el Elche, pero ha tenido un buen final, como el propio equipo ilicitano. En este mal año ha anotado 7 goles y dado 4 asistencias, números alejados de los que ofreció el pasado año, pero que dan fe de su oportunismo de cara al gol en un equipo poco realizador.
Hace unos días se conocía que, con el descenso del Elche a Segunda, su cláusula de rescisión bajaba de 25 a 15 millones de euros. Y los posibles destinos se aprestaban a hincarle el diente. El Getafe, que tendrá que suplir al lesionado Enes Unal, aparecía entre los primeros. Lazio, Atlético y Sevilla seguían ahí, pero Christian Bragarnik.
A todos los efectos, el delantero argentino acaba contrato el próximo año, pero Onda Cero y varios medios ilicitanos confirman que hubo un acuerdo entre el agente de futbolistas y presidente ilicitano y su compatriota para renovar ese contrato hasta 2026, por lo que el Elche tendrá la sarten por el mango a la hora de negociar. No tendrá la presión añadida de que su principal activo se vaya gratis en un año y, pese a jugar en Segunda, cuenta con ello a la hora de planificar la 'temporada del regreso'.