Tres semanas sin ganar han sacado a Sporting de Gijón del 'play off' de ascenso a Primera y el ambiente empieza a ser algo tenso tanto en Mareo como en El Molinón, en cuya planta noble lo tienen bastante claro. Si no hay ascenso, se cambiará de entrenador.
Y ya lo avisaba Miguel Ángel Ramírez tras el empate ante el Espanyol, que la situación está complicada para todos: "Hay miedos, bloqueos, inseguridades... Todos las tenemos. A veces olvidamos que los que juegan son seres humanos. Lo que tenemos en la cabeza es muy poderoso y nos puede bloquear las piernas. Es algo ante lo que es muy difícil luchar. Es algo por lo que pasamos todos los equipos, sean Espanyol o Sporting".
En este mismo sentido, el joven técnico canario reconoce que tiene un problema con la afición del conjunto asturiano, pero nada que no se pueda arreglar: "Hay enfado y desacuerdo, como en una familia. No rompamos esto. No hay una ruptura con la afición. Para todo hay capacidad de reconstruir. El ambiente de El Molinón va a depender de nosotros, de qué transmitimos y cómo nos vean. Desde el minuto uno. Tenemos que generar nosotros esa ilusión, está en nuestras manos. Sabiendo que se viven ahora momentos complicados porque es ahora cuando nos jugamos todo".
Y fruto de todo esto, la dirección deportiva sportinguista ya trabaja en la búsqueda del que será, salvo grata sorpresa, el nuevo inquilino de su banquillo. Y en ella, un nombre aparece por encima de todos y gana enteros para ser el nuevo entrenador del Sporting de Gijón en la 2024-25. Se trata de Rubén Albés, con quien ya se han reunido según apunta el periodista leonés Ángel García en sus redes sociales.
El técnico gallego y su agente asturiano Eugenio Botas ya han mantenido varios contactos en las últimas semanas con el club. De hecho, ya se le ha visto por Gijón varias veces desde que fuese destituido en el Albacete Balompié a finales del pasado mes de marzo.
Cabe recordar que Albés reside en Valencia y tiene un mismo perfil al del propio Miguel Ángel Ramírez, ya que ambos tienen 39 años. En su hoja de ruta, Rubén alcanzó el mayor éxito de su carrera la pasada temporada cuando clasificó al Albacete en el 'play off' de ascenso. CD Lugo, Valladolid B y Celta B completan parte de su trayectoria como entrenador. También probó suerte en el extranjero en el FC Hermannstadt de la Superliga de Rumanía.