Alvaro Arenillas3 min lecturaHay parón por fecha FIFA y se nota. Sin partidos en las grandes ligas europeas, la actualidad se centra en los choques entre selecciones y, más si cabe, en el futuro de muchos de los futbolistas que actualmente militan en los clubes punteros del mundo. Pues bien, dentro de esa rumorología que no descansa se enmarca también qué ocurrirá en unos meses –puede que en enero– con un Leroy Sané al que ya desean contratar varias escuadras.
El atacante del Bayern de Múnich, club en el que está viviendo actualmente su quinta temporada, tiene todas las papeletas para abandonar la entidad bávara. Acabando contrato el 30 de junio de 2025 parece imposible que renueve tal acuerdo, por lo que a mucho tardar se iría libre el próximo verano. Pues bien, atendiendo a tal presente, y según informa Bild, son varios los clubes de la Premier League lanzados para firmar al extremo zurdo.
Si hace algunos días se empezó a hablar del interés del Manchester United, a tal carrera se han unido con fuerza Arsenal y Liverpool, todos ellos clubes que ven como una excelente oportunidad poder hacerse con los servicios del jugador de ahora 28 años, por quien no deberían pagar traspaso salvo que deseasen contar con él desde el mes de enero.
Pese a que la etapa de Sané en el Bayern no vaya a terminar demasiado bien, ya que el desencuentro entre las partes es evidente, ello no esconde que el habilidoso jugador haya tenido en casi todo momento un muy buen rendimiento. Más claro: durante sus primeros cuatro años superó siempre los 10 goles y 10 asistencias entre todas las competiciones.
Si termina saliendo no será tanto por haber jugado mal como porque la situación salarial del jugador ha sido una barrera insuperable. Percibiendo en estos momentos 20 millones de euros brutos al año, la intención del futbolista es mantenerse en esos mismos guarismos, lo cual choca frontalmente con un Bayern que desea reducir su masa salarial, atacando sobre todo aquellos contratos con un mayor sueldo, justo donde se encuentran Sané y otros extremos como Kingsley Coman y Serge Gnabry.
Aunque el plan de Sané está claro: mantener su estatus en otro equipo, está por ver que los interesados vean tan claro ponerle sobre la mesa un contrato en los términos señalados. En la presente temporada está contando mucho menos para el Bayern y no está teniendo el brillo de las pasadas.