La primera jornada de la UEFA Europa League, al margen de lo sucedido entre el Niza y la Real Sociedad, ha tenido encuentros para todos los gustos. En el primer tramo, hay que destacar la derrota de Samu Omorodion y el Porto, que se vieron sorprendidos por un contundente Bodo /Glimt, que, a pesar de jugar casi toda la segunda parte con uno meses, se supieron imponer a los lusos, que empiezan mal su andadura en el nuevo formato del campeonato del Viejo Continente. En el segundo, destacar la goleada de la Lazio, que se ha mostrado muy sólida, el sorprendente empate del Manchester United, que se mostró impotente, ante el Twente o el
El cuadro neerlandés arrancó de forma arrasadora, tratando de poner contra las cuerdas al meta rival y dejarle fuera de juego desde los primeros compases. Eso sí, el cuadro visitante tuvo sus ocasiones, e, incluso, vio como el VAR le anulaba el que pudo ser el 0-1, obra de Qasem. Esto no les desanimó, ya que, en el minuto 23, Ouma adelantó a los suecos, que estaban haciendo saltar una de las grandes sorpresas de la jornada. Antes del descanso, los neerlandeses igualaron la contienda, gracias a una diana de Van Bommel, que les hizo respirar más tranquilos. El mismo jugador, a la vuelta de los vestuarios, les puso por delante, culminando la remontada del AZ, que dominaba a su rival. Sin embargo, los visitantes, que no cejaban en su empeño, a pesar de quedarse con 10, empataron pocos minutos después, gracias a Hedlund, que volvía a apagar a su rival. Parrott, de penalti, terminó de desigualar la contienda para los de Alkmaar, que dan un paso hacia delante en la Europa League.
No pudo empezar mejor el encuentro para el cuadro portugués, ya que su nueva estrella, Samu Omorodion, se encargó de inaugurar el marcador. Poco antes de que se cumpliera el minuto 10, el ex del Atlético de Madrid, de cabeza, cerca del meta, aprovechó una buena asistencia de Moura para poner en ventaja a su equipo, que dio un golpe de efecto. La alegría no les duró mucho, ya que en el 15, el cuadro local, a través de Kogh, igualó la contienda. Hauge, en el 40, completó el dominio de los locales, que pusieron contra las cuerdas a los lusos, que no terminaban de entender qué pasaba sobre el campo. Määtä, en la segunda parte, metió el miedo en el cuerpo al Bodo, ya que fue expulsado, dejándoles con un hombre menos durante casi todos los segundos 45 minutos. Lejos de rendirse, el que anotó el segundo fue el encargado de anotar el tercero para los noruegos. A pesar de que Gül recortó distancias, no fue suficiente para evitar la primera derrota del curso de los visitantes, que tienen muchas cosas que corregir.
Desde los primeros compases, tanto otomanos como helenos se volcaron en la portería contraria, tratando de adelantarse en el marcador y tener algo de tranquilidad sobre el verde. Los locales, en el primer tiempo, tuvieron grandes ocasiones, como un remate a quemarropa que fue atajado por el meta de los de Salónica, que debían reaccionar para no perder el control sobre el césped. El choque entró en un claro dominio del Galatasaray, que se estaba mostrando sólido, pero sin acierto de cara a puerta con el paso de los minutos. El premio a su insistencia llegó a comienzos de la segunda parte, cuando Baba, en propia puerta, puso por delante al conjunto local. A pesar de su dominio, el PAOK fue capaz de igualar la contienda, gracias a una diana de Konstantelias que les volvió a meter de lleno en el enfrentamiento. Sin embargo, era cuestión de tiempo que los de Estambul volvieran a adelantarse, y lo lograron gracias a la diana de Akgün en el 75, la cual encarriló el partido y les dio mucha vida. Icardi, en el descuento, sentenció y les otorgó su primer triunfo en esta 'nueva' Europa League.
El cuadro alemán, favorito en este encuentro, fue el que tomó el control, intentando llegar pronto a la portería rival. Eso sí, los locales, que tuvieron algunas aproximaciones, obligando a intervenir al meta del Hoffenheim, demostraron que iban a pelear por los primeros tres puntos del curso. De hecho, los daneses empezaron a acumular, de forma gradual, llegadas, buscando ser los que se adelantaran. Sin ningún ánimo de dejarse avasallar, los visitantes fueron creciendo sobre el césped, tratando de respirar y oxigenarse. Gracias a ello, empezó a asediar a su rival, que empezaba a tener problemas para defenderse. Sin embargo, fue el Midtjylland, rozando el descanso, el que puso el 1-0 en el electrónico, gracias a una buena acción de Osorio. A pesar de todo, los germanos, haciendo gala de una gran resistencia, empataron en las postrimerías con un tanto de Moerstedt, que congeló a sus rivales cuando casi cantaban el triunfo.
Desde el primer momento, fue la escuadra de Ten Hag la que trató de adelantarse en el marcador, tratando de asediar a la defensa neerlandesa, que no podía despistarse en un solo momento. Eso sí, los visitantes dejaron claro que no venían a ser el convidado de piedra, por lo que el Manchester United no podía perder el ritmo. A pesar de su dominio, los 'red devils' necesitaban dar un paso hacia delante, ya que no terminaban de asediar al Twente, cuyo meta tuvo que intervenir en alguna que otra ocasión para impedir la diana local. Finalmente, en el tramo final de la primera mitad, Eriksen culminó el dominio británico, estableciendo el 1-0 y dando mucho aire a los suyos. La mejora visitante en los segundos 45 minutos fue notable, culminando en la diana en el minuto de 68 de Lammers, que congeló el 'Teatro de los Sueños'. A pesar de los acercamientos de los ingleses en los últimos minutos, los visitantes se hicieron fuertes y amarraron un valioso empate que les da vida.
El cuadro italiano fue muy rápido a la hora de adelantarse en el marcador. Gracias a un tanto de Dia, la Lazio dio un golpe de efecto y se puso por delante de forma veloz, algo que siempre supone una gran dosis de confianza. Si había dudas de que los romanos iban a controlar el choque, en el minuto 33, llegó su segundo tanto, obra de Dele-Bashiru. De esta forma, antes del descanso, ya contaban con una importante renta que les dio cierta calma. Poco después, llegó el tercero, ya que les puso todavía más lejos, a pesar de que se quedaron con uno menos, y les allanó el camino, más todavía después de que los locales se quedaran también con 10, para una contundente primera victoria en el torneo.
El conjunto local fue el que dominó desde que pitó el colegiado, tomando el mando del choque e intentando provocar numerosas ocasiones que les dieran tranquilidad sobre su rival, que buscaba hacer el máximo daño posible. Sin embargo, fueron los checos los que se adelantaron, en el minuto 37, gracias a un tanto de Jurásek, que les dio mucha confianza, confirmando el dominio que llevaban acumulado desde hace tiempo. En la segunda mitad, lejos de aflojar, continuó su asedio a la meta contraria. Ante un Ludogorets inutilizado, el Slavia Praga, que sentenció en el segundo tiempo gracias a una diana de Chytil, mantuvo un buen ritmo sobre el verde, lo que les permitió cosechar buenas sensaciones para los próximos encuentros en la antigua Copa de la UEFA.
El cuadro húngaro fue el que, en un primer momento, quería hacerse con el control del partido. Apretaban los locales, pero el gol no terminaba de llegar, algo que empezaba a inquietar a la afición belga, que esperaba más de sus jugadores. La batuta y las ocasiones eran del Anderlecht, pero no terminaban de acertar de cara a la puerta contraria. Pasaba el tiempo, pero no eran capaces de poder superar la muralla visitante, que se estaba haciendo cada vez más fuerte. Finalmente, como suele ocurrir, la barrera cayó. En el minuto 60, los de Hubert se pusieron por delante en el electrónico, gracias a una diana de Verschaeren, lo que hizo suspirar de alivio a todos sus aficionados. Dolberg, de penalti, en el 66, apenas seis después, firmó la sentencia de un duelo en el que los visitantes no tuvieron opción para dar la sorpresa. La expulsión de Angulo y el tanto en el 86 de Traoré apretaron las cosas, pero fueron capaces de mantener la calma para llevarse la victoria.