Como ya dijo en su día Pep Guardiola cuando era entrenador del FC Barcelona, en las salas de rueda de prensa "Mou es el puto amo". Y a excasas horas de medirse a la Real Sociedad en la ida de los octavos de final de la Europa League, el técnico portugués ya se ha quitado de encima cualquier tipo de presión. Lo ha hecho en la previa del partido, en la que ha analizado al conjunto donostiarra y ha dejado entrever que los romanos no son los favoritos, sino los vascos.
De esta forma, el preparador del conjunto italiano ha señalado que hoy por hoy es difícil señalar las debilidades del cuadro realista: "Es un equipo muy bueno y sinceramente es difícil encontrar puntos débiles. Imanol es sin duda un muy buen entrenador y el equipo está organizado tanto defensiva como ofensivamente".
Para este choque, que se disputará mañana jueves en el Olímpico de Roma a partir de las 18:45 horas, el técnico luso ha tenido que preparar a los suyos concienzudamente para que estén bien atentos a los aspectos tácticos del envite: "La Real cambia de sistema fácilmente. Comienza con el 4-4-2 básico pero cuando cambia al 4-3-3 les da mucha movilidad a los jugadores atacantes. Tiene jugadores técnicamente muy buenos, no solo Oyarzábal".
En la actualidad, ambos conjuntos ocupan la cuarta plaza en sus respectivos campeonatos, sin embargo, para Mou tiene mucho más mérito lo que están consiguiendo los de San Sebastián: "En LaLiga ser cuarto por detrás de los tres gigantes es mucho, realmente es un equipo de calidad. No se puede decir que hayamos tenido suerte con el sorteo, pero cuando estás en la Liga Europa es difícil".
Respecto a su equipo y al nivel físico en el que se encuentran, el setubalense comentó que no le preocupa demasiado esta parcela porque "estamos en mando de grandes profesionales en el aspecto de la preparación", al tiempo que destacó que hay jugadores con mejores condiciones que otros: "Es una cuestión individual, hay jugadores como Javier Zanetti, por poner un ejemplo, que podrían jugar siete partidos a la semana y a otros, en cambio, les cuesta más".
Por último, Mourinho le lanzó un último mensaje a su vestuario para que afronten este partido como una auténtica final: "Es también una cosa de mentalidad, de querer ganar todos los partidos y de entender que si no se consigue esto se puede poner en peligro los objetivos. Tenemos que mejorar nuestra regularidad, pero es cierto que todavía nos cuesta jugar tres partidos seguidos".