Francia sigue sin convencer. Deschamps no encuentra la forma en la que su equipo deje de ser un conjunto de estrellas que en una acción ganan un partido y que se convierta en un equipo, que hace cosas bien en defensa y que es capaz de dominar y someter a sus rivales. Para ello tiene dos objetivos, recuperar la mejor versión de Antoine Griezmann y poder contar con Kylian Mbappé, su principal aliado con los resultados.
Y esto, cada vez está más cerca. El galo ha sido la principal novedad en la sesión de este sábado en clave Selección Francesa. Ha sido en Paderborn, en un amistoso que se ha disputado contra el juvenil del equipo de la ciudad en el Home Deluxe Arena. El capitán de los galos formó parte del once titular junto al resto de futbolistas que fueron suplentes o no tuvieron demasiados minutos en el enfrentamiento ante Países Bajos del pasado viernes.
Mbappé pudo volver a entrenar con normalidad, que no lo hacía desde el pasado día 16 cuando tuviese el accidente en el partido inaugural para los suyos. Ha podido correr, jugar y disputar duelos. Y todo con esa máscara que tendrá que portar en su rostro de forma obligatoria hasta que termine la Eurocopa, momento en el que se operará para solucionar su lesión en el tabique nasal.
Y es que todo el mundo se pregunta si el extremo izquierdo se va a apuntar al último partido de la fase de grupos ante Polonia. Todo apunta a que sí, debido también a que todo está abierto y podría haber complicaciones en la clasificación a la siguiente fase. No debería ser necesaria su presencia en teoría de acuerdo a la plantilla francesa, pero la práctica de las dos primeras partidas ha demostrado que sí lo es. Todo dependerá de las sensaciones del futbolista.
La máscara es un elemento nuevo al que se tiene que adaptar. Terminar de sentirse cómo y encontrar su mejor versión con ella. A pesar de que haya tenido minutos en el amistoso, la intensidad, los duelos, las disputas, los choques... Nada tiene que ver con lo que puede encontrarse ante los polacos. Francia está en vilo. Y con razón. Necesitan rendir bien y conseguir puntos. Máxime, ganar. Y sin su capitán en el once inicial no han conseguido hacerlo en los últimos siete partidos que han disputado.