Escocia
Hungría
La fe inundaba las casas de los escoceses antes del partido. La gran diferencia de goles era difícil de remontar pero en este deporte siempre hay una opción. Por su parte Hungría llegaba al partido con el objetivo de terminar de la mejor forma posible su andadura en la Eurocopa.
El encuentro comenzaba con bastante protagonismo para los de Steve Clarke. Acumulaban un poco más de balón que su rival en la primera mitad del partido y la estrategia de los húngaros pasaba por esperar atrás bien arropados y salir al contragolpe para hacer daños. Realmente, quien necesitaba más los puntos eran los escoceses y los de Marco Rossi supieron transmitírselo. Además, era un planteamiento medianamente inteligente, ya que tenían futbolistas muy veloces arriba y podrían aprovechas los espacios.
Aunque poco a poco fue despertando Hungría. Un disparo de falta de Szoboszlai, Varga también muy activo en zona de tres cuartos. Pero poco más. La apuesta seguía siendo demasiado pobre y quien buscaba continuamente el protagonismo con balón eran los escoceses. Lo único que les faltaba era tenerlo en ocasiones.
Poco cambió la cosa tras la salida del túnel de vestuarios. En los primeros quince minutos del segundo tiempo a penas habían generado una ocasión ambos equipos. A nivel defensivo Escocia daba una buena imagen por momentos, pero su ineficacia e inoperancia arriba ha marcado la diferencia durante todo el torneo en este grupo.
En el minuto 70 cambió todo. Se paralizó el partido. Varga se llevaba un golpe tremendo con Gunn y quedaba inconsciente. Los servicios médicos estuvieron un tiempo atendiendo al futbolista y finalmente tuvo que ser retirado en camilla. Se enfriaban los ánimos del partido y sobre todo de todos los presentes en el estadio, donde todo quedaba en un segundo plano.
El partido continuó, y vaya si lo hizo. Con el incidente, el tiempo de descuento se iba a los 10 de añadido. Escocia había pasado de dominar el encuentro a dejar lagunas por todo el largo del terreno de juego y le estaba dando más opciones de la cuenta a Hungría. No se estaban jugando nada ninguno de los dos con el empate, ya que Suiza y Alemania habían resuelto con una victoria de los alpinos. O eso parecía. La anfitriona empataba en Frankfurt en el descuento, y los húngaros hacían lo propio en el minuto 98. K. Csoboth sembraba la locura y le daba mínimas opciones de clasificarse como tercera de grupo a una selección que volvía a eliminar a Escocia en la primera fase.
0 - Escocia: Gunn; Ralston (McLean 83'), Hendry, Hanley, McKenna, Robertson (McGregor 88'); McGinn (Amstrong 76'), Gilmour (Christie 83'), McGregor, McTominay; Adams (L. Shankland 76').
1 - Hungría: Gulacsi; Botka, Orbán, Dárdai (Szalai 70'); Bolla, Styles (Nagy 66'), Schäfer, Kerkez; Sallai, Varga (Adam 74') y Szoboszlai.
Goles: 0-1, K. Csoboth (minuto 98).
Árbitro: el colegiado del partido ha sido el argentino Facundo Tello. Amonestó a Orban, Styles, Schäfer, McTominay, Kleinheisler y Csoboth.
Incidencias: el encuentro se ha disputado en el MHPArena de Stuttgart con capacidad para 60.449 espectadores.