Las dudas no desaparecieron del seno de la selección francesa a pesar de su pase a cuartos de final tras vencer a Bélgica por la mínima con un tanto en propia puerta de Jan Vertonghen. El juego de los de Didier Deschamps sigue sin convencer a nadie y son totalmente conscientes de que ante rivales de mayor calado, dependes de chispazos de las grandes estrellas puede no ser suficiente.
En ese partido, Camavinga estuvo condenado al banquillo y no disputó un solo minuto (Deschamps tan solo realizó un cambio). Y es que tras disputar sólo 48 minutos en lo que va de torneo repartidos en más de un encuentro deja claro que el centrocampista del Real Madrid, vigente campeón de la Champions League y LaLiga, no cuenta con la confianza del seleccionador. Un preparador que dicho sea de paso, está muy criticado y puesto en duda entre los aficionados por el rendimiento que está mostrando la principal favorita (o al meno lo era antes del inicio del torneo).
El destino habla claro y ha dicho que quiere darle una oportunidad al galo. En el partido de octavos de final, Adrien Rabiot vio la tarjeta amarilla que le ha terminado condenando a la sanción. Se perderá el duelo ante Portugal y con su ausencia se abre el debate de su sustituto. Aquí aparece Camavinga, que se erige como principal candidato a formar parte del once ante los de Cristiano Ronaldo.
Eso sí, su situación no viene sólo de ahora. De los 39 partidos en los que se ha puesto la camiseta de Francia, tan sólo en 10 ha sido titular. Un futbolista que en su Club da exhibición tras exhibición pero que nunca termina de explotar con su país y convertirse en titular indiscutible. Según apunta L’Equipe, entraría en el mismo 4-4-2 que venció a los ‘red devils’.
Pueden parecer cuestiones menores, pero la relación se nota que es bastante áspera. Ya en el partido ante Polonia tuvieron un desacuerdo e intercambio de opiniones debido a varias caídas del jugador, que no elegiría bien las botas, ante las quejas de Deschamps.
Es un ultimátum para él. Necesita aprovechar la oportunidad. A estas alturas es un jugador que necesita aparecer constantemente en el escaparate y para el que es bueno tener minutos en todos los partidos. Ya ha repetido en muchas ocasiones que “no le gusta” se lateral izquierdo, pero necesita coger rodaje, en la posición que sea. Si ya ha sido difícil para él contar con minutos hasta ahora, el hacerlo bien si recibe la opción ante los lusos puede convertirse en la última.