La situación de Manolo González al frente del RCD Espanyol es más delicada que nunca. El técnico gallego, que viene de empatar frente al Valencia, otro club que se encuentra contra las cuerdas, está de forma permanente en el punto de mira. Este comienzo de temporada no está siendo demasiado positivo para el conjunto perico, que quiere escapar cuanto antes de la zona de descenso. Cada vez parece menos probable que los barceloneses puedan mantener la categoría y no parece que su entrenador sea el adecuado para darle la vuelta a la situación. Por ello, ya no tendría margen de error, lo que es algo significativo para alguien que consiguió el ascenso a la máxima categoría el pasado curso.
Hay que recordar que, esta semana, el Espanyol afrontaba tres partidos que podrían haberlo cambiado todo. Sin embargo, en los dos primeros, ambos en casa, el equipo catalán no ha sido capaz de romper su mala dinámica. Ante Osasuna y Valencia, los de Manolo González no han podido pasar del empate, algo que no hace sino aumentar las dudas y el runrún en torno a un entrenador con el que se cayó de forma sorprendente en la Copa del Rey.
Cierto es, tal y como recuerda As, que los pericos se encuentran a apenas un punto de la permanencia, por lo que la situación no es tan dramática como la del Real Valladolid, por ejemplo. Sin embargo, las malas sensaciones cosechadas en el segundo tiempo ante los de Rubén Baraja, otro técnico que se encuentra en la cuerda floja, han aumentado las dudas. De hecho, si el Espanyol cayera ante la UD Las Palmas, que se encuentra en un gran momento en el torneo doméstico, González podría ser “perfectamente destituido”.
Ante un viejo conocido como es Diego Martínez, quien ha conseguido darle la vuelta a la mala situación en la que se encontraba la UD Las Palmas, Manolo González afronta un nuevo ser y no ser al frente del Espanyol. Es verdad que no es la primera ocasión en la que su cargo podía estar en juego. No en vano, hay que recordar que, después de la contundente goleada asestada por el Girona en el duelo disputado en Montilivi, su figura pudo haber caído, dando paso a una nueva etapa. Sin embargo, el apoyo de los capitanes y de la masa social fue decisivo para que el club no tomara la decisión de cesarle.
En el caso de que perdiera ante la UD Las Palmas, podría ser el momento ideal para que el Espanyol tomara la decisión de afrontar un relevo en su banquillo. Teniendo en cuenta que no volverán a jugar hasta el 11 de enero, una posible caída en las Islas Canarias sería el fin de Manolo González, que se lo juega absolutamente todo en este partido. Sergio González, preparado, sería el elegido si se termina echando al actual primer técnico, pero hay que esperar. Hay que estar atentos a ver qué sucede ante los amarillos, que pueden dictar sentencia.